Ella le prestaba ayuda desde hacía dos años, dándole ropa y comida, y él la agredió sexualmente, la tarde del 27 de agosto de 2019, tras una discusión en el domicilio de la mujer, en Ourense, que le recriminó que le faltaba dinero y le pidió que se lo devolviera. El acusado fue ayer a juicio, celebrado a puerta cerrada para proteger la intimidad de la víctima. M. T., nacido en Senegal y de 39 años, se conformó con una condena de 2 años de prisión y 5 de alejamiento. La pena que inicialmente solicitaba la Fiscalía, de 5 años de cárcel, se ve rebajada por su reconocimiento de hechos, que hace posible el acuerdo entre las partes, y por la circunstancia atenuante de alcoholismo.

El acusado arrojó a la mujer sobre el sofá, se colocó sobre ella, intentó rasgarle el vestido, le hizo tocamientos, se frotó sobre ella y además le pasó la lengua por el cuello y la cara. Cuando la víctima le pedía que parase y forcejeaba, el agresor sexual le propinaba bofetadas.

Tal y como se considera probado con la sentencia de conformidad aceptada ayer por el acusado, la víctima logró despojarse del acusado pero este volvió a ponerse sobre ella e hizo ademán de agredirla, exigiéndole que no se moviera y que se quitara la ropa interior.

Después le tocó el pecho y la cara y se frotó contra su cuerpo. La mujer le pidió agua y aprovechó para abandonar la habitación pero el acusado volvió a llevarla al sofá. "¿A dónde crees que vas?", le dijo el encausado.

Escapó desnuda al portal

De nuevo se puso sobre ella, le hizo tocamientos y se frotó. Tras darle varias bofetadas, se detuvo y se dirigió a la cocina a coger un vaso de agua, momento que la víctima aprovechó para abandonar la vivienda y llamar a la Policía. Cuando los agentes llegaron, se encontraron a la víctima desnuda en el portal del edificio.

La víctima sufrió diversos hematomas en distintas partes del cuerpo a consecuencia de la agresión sexual, y el acusado tendrá que abonar una multa de 90 euros por la comisión de un delito leve de lesiones.