Una mujer de 50 años fue juzgada ayer en el Penal 1 de Ourense como presunta responsable de un delito de defraudación. La Fiscalía pide una multa de 1.620 euros para la acusada, que presuntamente tuvo agua en 2016 gracias al enganche que hizo en el contador de un vecino. El importe del perjuicio económico ocasionado fue de casi 689 euros.

Según el escrito de acusación del ministerio público, la acusada hizo el enganche al contador de agua del perjudicado mediante la colocación un empalme ilegal en su medidor.

Dispuso de una cantidad de agua que fue cifrada en un total de 688,89 euros. Además de que el vecino vio incrementado el gasto sin ser responsable, el enganche provocó una avería que ocasionó desperfectos en el domicilio del perjudicado. La Fiscalía quiere que, en el caso de una condena, se determine en la fase de ejecución de sentencia el importe de estos daños, para que la acusada los abone. En la petición de responsabilidad civil se incluye una indemnización a favor de la concesionaria de agua por el importe presuntamente defraudado.