Antes de despedirse y de subirse de nuevo al bus que lo llevó por el interior de los túneles del AVE en Ourense, el ministro de Fomento anunció que "en los próximos días" se publicará en el Boletín Oficial del Estado el proyecto de construcción del enlace entre Ourense, Eirasvedras y la Nacional 120. "Es otra gran obra y se expondrá al público para alegaciones y observaciones", precisó, "tal y como nos habíamos comprometido con la Xunta".
El proyecto al que se refiere el ministro, llamado variante o enlace de Eirasvedras con la N-120-enlace de Quintela con la N-120, es en realidad el primer tramo de la conocida como Variante Norte, y tiene una partida consignada en los Presupuestos Generales del Estado de 3,7 millones de euros para este año.
Este tramo es fundamental porque su ejecución futura permitiría además llevar a cabo uno de los proyectos más esperados desde hace años por la ciudad, como es el bulevar termal, dado que cuando este tramo esté operativo -nadie habla de plazos todavía- permitirá liberar una parte de ese desdoblamiento y convertirá ese tramo de la Nacional 120 paralelo a la orilla derecha del Miño donde están las termas, bulevar de tráfico restringido, con zonas de paseo, parque y carril-bici. Es decir, una conexión ambientalmente integrada en el entorno ribereño.
Este primer tramo de la futura variante norte de Ourense salió a información hace un año, y ahora sale el proyecto constructivo. El presupuesto final de licitación era entonces de 30 millones de euros.
Las ventajas, si se ejecuta la variante norte completa, es que permitirá unir la A-76 a Ponferrada y la A-56 a Lugo con la Autovía Rías Baixas y la AG-53 de Santiago por el norte de la ciudad y el tráfico no tendría que pasar por el casco urbano.
