El alcalde de Ourense, Xesús Vázquez, reconocía hoy a la mañana en el balance del primer año de gestión “que no fue nada fácil”, aunque aportó un documento de 27 folios con las sesiones realizadas que estuvieron marcadas por la “limitación de estar en minoría” con diez concejales. En este sentido, reconocía que “no me preocupa ni me quita el sueño una posible moción de censura”, en alusión a los sucesivos intentos del portavoz de DO, Pérez Jácome, para convencer a los socialistas y provocar un cambio de gobierno.

Lo más importante para Jesús Vázquez de este año al frente del Concello de Ourense es que “se volvió a la normalidad”, en referencia al anterior mandato del gobierno socialista que derivó en enfrentamientos internos del propio gobierno. También hizo referencia a la “ilusión que tenemos para sacar adelante proyectos”.