Tras pasarse toda la jornada mirando al cielo y deseando que no se cumpliesen las previsiones de lluvia, la ciudad de Ourense recuperó el pasado viernes la procesión del Santo Enterro, una celebración multitudinaria que los cuatro últimos años no pudo llevarse a cabo a causa del mal tiempo viéndose reducida a un viacrucis por el interior de la catedral con el Santo Cristo del Perdón, de Velle, y sus cofrades.

Además, el regreso a la vía pública se produce con la novedad de que los nueve pasos se reúnen en la catedral y no en la delegación de Hacienda para salir juntos por la calle Lepanto y recorrer el casco histórico bordeando el parque San Lázaro hasta la Praza Maior.

El vicario de pastoral, José Pérez Domínguez, anunció ayer que está previsto que el próximo año se incorporen a la procesión los dos pasos que están actualmente en proceso de restauración, La Crucifixión, de Santo Domingo, y la Adoración de Jesús en el Huerto, que se sumarán a los nueve que el viernes volvieron a recorrer las calles seguidos y contemplados por miles de personas: La Santa Cena, portada por la Adoración Nocturna; La Flagelación, de Santa Teresita; Jesús Nazareno, del Sagrado Corazón; el Santo Cristo del Perdón, de Velle; El Santo Cristo, de San Pío X; La Piedad, de la parroquia de Fátima, en O Couto; La Cruz Desnuda, de Cristo Rey; La Urna del Sepulcro, del Seminario Mayor, y La Dolorosa, de Santa María Nai.

El Obispado ha pedido a las cofradías y parroquias que porten los pasos a hombros y no con plataformas con ruedas, un mecanismo "impensable en Ferrol", explica el vicario. En Ourense, solo Velle y los alumnos del Seminario Mayor los llevan a hombros. "Queremos darle más vida y sensibilidad a la procesión", añade.

En términos de realismo, destaca la crucifixión que escenifican unos 60 vecinos de Celanova desde hace más de 20 años en el monasterio de San Rosendo y que llegó a crucificar al alcalde José Luis Ferro el año pasado. En esta ocasión, el regidor ha decidido no exponerse y ha cedido el lugar a uno de los actores que ejercía de apóstol. Efectos especiales como humo artificial o sangre líquida logran una "pasión" tan creíble que provoca lágrimas entre los fieles.

El programa de la Semana Santa llega hoy a su fin con la Pascua de Resurrección, a partir de las 11.15 horas en Santa María Nai.