Antonio Blanco ofrece su mejor versión en la muestra que realiza en el Museo Municipal, combinando el cubismo con las representaciones esféricas que simbolizan la reproducción de los planetas, junto a maternidades de hermosa factura.

El escultor ourensano -tío del concejal de Ermua asesinado por ETA, Miguel Ángel Blanco-, centra ahora su inspiración en las formas esféricas, que constituyen el denominador común de nuestra existencia. "Todo es esférico y redondo, desde la fruta a los planetas" dentro de la constante evolución del universo en el que "mueren y nacen nuevas estrellas".

Engloba dos mundos completamente distintos. "Tanto en la vida como en el cubismo, todo tiene un principio y un fin: el nacimiento y la muerte. En cambio en la esfera no existe, porque la rueda da vueltas y no tiene fin", concluye.