Los pastores eléctricos que utilizan los ganaderos para controlar en un mismo prado a sus rebaños, deberán instalarse previa presentación a la Consellería de Industria de un proyecto técnico de instalación de redes de baja tensión, similar al que hay que elaborar para la red eléctrica de una gran industria, un cuartel o una recinto carcelario.

"No salgo de mi asombro. Desde niña el pastor eléctrico era un sistema tan sencillo que hasta mi padre nos enviaba a instalarlo, pues la descarga que produce es mínima, solo un aviso, si no también mataría a las vacas cuando lo tocan", afirma María Páez. "Creo que cada día están poniendo más trabas y presionando más al agricultor y al ganadero en lugar de apoyarlo y nos hacen aún más difícil seguir viviendo en el campo".

María Páez gestiona una explotación ganadera en Viana do Bolo y es además secretaria de Organización de Unións Agrarias en Ourense, un sindicato sublevado, tras tener conocimiento de que varios ganaderos de la provincia, tras ser denunciados por algún particular, han recibido una carta de la Xunta en la que se les exige elaboren este proyecto técnico de ingeniería, para instalar un sistema de pastor eléctrico, pese a que suele ser rudimentario, pues incluye unos postes de plástico y unos hilos, que ni siquiera van conectados a la red eléctrica.

Amenaza de sanción

"Son dos postes con un cable, algunos llevan baterías, otros se cargan con el coche y hay algunos más novedosos que incluso se alimentan con placas solares", explica María Páez . "Es decir que la intensidad eléctrica es mínima, pero aún así tras las denuncias la Xunta exige a estos ganaderos que paguen un proyecto técnico y les amenaza incluso con una sanción" añade la representante de UU AA.

Para este sindicato está claro que la Consellería de Industria "parece desconocer que la normativa que pretenden aplicar al pastor de vacas es la referida a cercas conectadas y redes eléctricas dedicadas fundamentalmente a protección de recintos de seguridad como naves industriales, cuarteles o prisiones entre otras".

El sindicato exige por tanto "el cese inmediato de estas prácticas, completamente abusivas" y recuerda a las administraciones que "su obligación es resolver problemas, no crearlos". En este sentido el sindicato va a solicitar una reunión con el subdelegado el Gobierno en Ourense y el delegado de la Xunta en Galicia "para poner coto a este sin sentido".

Inaplicable

Para María Páez la práctica diaria del ganadero es además incompatible con la aplicación de esta nueva exigencia legal pues "el pastor de vacas o pastor eléctrico es un elemento móvil que el ganadero va trasladando a distintas fincas, según el lugar donde vaya a pastar el ganado".

Considera que esto obligaría "a presentar un proyecto diferente para cada prado, lo cual es inaudito y no se puede aplicar ". Pide, por tanto "una mayor colaboración y apoyo al ganadero o acabarán con el sector".