Está claro que existen miles de maneras de entender la política. Personalmente opino que no todo vale para intentar obtener réditos partidistas cuando para ello se ataca despiadadamente y sin fundamentos a personas e instituciones. En los últimos días he sido objeto de un intento de persecución política por parte del portavoz del BNG, Xabier Ríos. ¿Como presidente del PP? No, como trabajador del Puerto, que es mi única fuente de ingresos (de la política percibo cero euros), a diferencia de la persona que ha intentado menoscabarme a mí y a mi carrera profesional.
Llevo desde el año 2002 trabajando en la Autoridad Portuaria como Jefe de Unidad Comercial, con plaza en propiedad. En estos 16 años he desempeñado diferentes funciones con hasta cinco presidentes distintos, tanto del PP como del PSOE y jamás nadie había dudado ni de mi capacidad ni de mi trayectoria. Hasta ahora. Y me siento dolido en lo personal y defraudado en lo profesional y en lo político.
He empezado como se empieza en los trabajos que te forjan como profesional: por abajo. He ido adquiriendo experiencia y progresando. En 2008 ascendí a División Comercial con el bipartito PSOE-BNG en la Xunta. La última vez que lo hice fue en 2013, cuando llegué al Departamento Comercial y Marketing, al haber aprobado Puertos del Estado y el Consejo de Administración ese puesto y otros cambios en el organigrama. Hasta ahí nadie dijo nada. La única diferencia es que antes era presidente de Cruz Roja y ahora del PP de Vilagarcía y eso parece ser que es lo único que molesta al portavoz del BNG.
No toleraré que se ponga en tela de juicio ni mi carrera profesional ni la de los demás compañeros de la Autoridad Portuaria. Me parece infame que un portavoz municipal, que además es consejero del Puerto, me critique y acuse de esta manera sin haberse dignado siquiera a consultar el organigrama que está colgado en la web de la Autoridad Portuaria. En los últimos 16 años se han registrado una decena de ascensos en puestos similares al que yo ocupo y no se ha interesado.
En España se blinda la protección de la filiación política y sindical de los trabajadores, sin embargo hay representantes políticos que no lo respetan y tratan de arremeter sin argumentos contra quien no comparte sus siglas ni sus ideas, más rápidos acusando que informándose, amigos del ruido y expertos en el espectáculo de la confrontación.
*Presidente del PP de Vilagarcía
