El Circo del Sol regresó ayer al Multiusos Fontes do Sar, en Santiago de Compostela, con su espectáculo Alegría, una fábula sobre la lucha de poder entre generaciones en un reino ficticio tras la muerte del rey. Así lo explicó ayer Bruno Darmagnac, director artístico del espectáculo, cuyas entradas ya están agotadas para todas las funciones que ofrecerá en la capital gallega.

Los "diferentes personajes" que aparecen en escena en este montaje representan así una lucha por el poder entre la generación preestablecida y los jóvenes, una lucha que para Darmagnac es "interminable", dado que los jóvenes se harán mayores y continuarán su pugna con la siguiente joven generación.

El espectáculo Alegría fue creado en 1994, recordó su director artístico, en el año en el que comenzó a popularizarse el uso de internet. Así, aunque Darmagnac resaltó que no se trata de una obra sobre internet, sí estableció parecidos al tratarse de un elemento "que la vieja generación no entiende y la joven domina".

Paralelamente, el director artístico recordó que el espectáculo ha experimentado una "evolución" en sus 17 años de historia y, aunque mantiene su "concepto", ha cambiado elementos de vestuario, personajes y números de acrobacia, que se han hecho "cada vez mejores".

En la ejecución de Alegría, un espectáculo que "gusta a toda la familia", participan un total de 55 artistas de 18 países diferentes, sobre un escenario que lleva más de 10 horas montar debido a sus enormes características –con un techo que pesa 70 toneladas–.

De esta manera, Santiago se convierte en una de las cinco ciudades de España donde actuará la compañía con base en Montreal, junto a Málaga, Zaragoza, Granada y Bilbao. Asimismo, será la segunda vez que la ciudad acoja un espectáculo del Circo del Sol, que visitó el año pasado Compostela con Saltimbanco.

En esta ocasión, la compañía realizará en la capital gallega un total de diez pases. Desde ayer hasta el domingo día 11, los artistas saltarán al escenario en dos turnos, a las 17.30 y a las 21.30 horas, excepto el domingo, día en el que se adelantan media hora. El evento cuenta con el patrocinio de la Fundación Cidade da Cultura y del 800 Aniversario de la Catedral de Santiago.