Un corzo y un jabalí provocan accidentes de tráfico en las carreteras de O Morrazo

Entorno al mediodía de ayer, la consellería de Medio Ambiente estuvo a punto de tener pruebas fidedignas de que hay corzos en O Hío, algo que se resiste a creer desde que en 2019 fueron avistados por los vecinos de Vilariño, Pinténs, Vilanova y Donón. Un corzo salió vivo de una colisión con un vehículo, muy cerca del cruce de O Viso. Nadie se explica muy bien cómo apareció, ni como fue capaz del escapar de un escenario que era propicio para su muerte. Pero lo hizo. De todas formas, ahora se realizará el parte de daños correspondiente y la palabra corzo aparecerá en algún expediente administrativo, que se supone hará cambiar de opinión a la Xunta de Galicia. En el año 2021 se había visto muy cerca de A Lagoa de Vilariño. Los vecinos desconocen cómo llegaron hasta la parroquia de O Hío estos animales, que desde Medio Ambiente se consideraba que era una leyenda vecinal. Este organismo negó siempre que los hubiese soltado, que era una de las sospechas que tenían los vecinos. Por lo que dicen los lugareños, la población de corzos va en aumento.

La presencia de jabalíes en las carreteras de O Morrazo se hace preocupante. Pasada la medianoche de ayer los servicios de emergencias tuvieron que atender a una mujer, que resultó herida después de alcanzar un jabalí el vehículo en el que viajaba por el corredor do Morrazo, en torno al kilómetro 12.

El animal interceptó la vía y sucedió la colisión. Desde la Axencia de Emerxencias 112 Sos Galicia sitúan el accidente en Moaña, aunque la Policía de este municipio asegura que ya se trata de Cangas, en el tramo que no es autovía, sino antiguo corredor, con un solo sentido de circulación a cada lado.

A mayores de las lesiones provocadas por el choque, el 112 informa que la mujer se encontraba en estado de gravedad, por lo que urgió la asistencia médica.

Los conductores que atraviesen las carreteras de O Morrazo tendrán que estar atentos a esas señales que todos suponíamos desfasadas, en las que dentro de un triángulo aparece un ciervo que indica “Peligro, animales salvajes sueltos”. De momento, los corzos no llegaron todavía a la autovía de O Morrazo. Pero a este paso no tardarán mucho.

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