Un incendio rompió ayer de golpe la tranquilidad habitual que se respira en la playa de Rodeira, en Cangas. El olor a quemado y una humareda originada en dos casetas del Club Náutico de Cangas puso a cientos de personas en alerta cerca de la una de la tarde. El humo del incendio tomó la avenida de Ourense, allí donde la pertinaz lengua de niebla no había alcanzado. La dificultad para la circulación de vehículos se complicó y todas las alertas se activaron, incluyo las que afectaban a bañistas, que tuvieron un aliciente más en el día de ayer, que tardó en abrir. La proximidad de las instalaciones del Club Náutico Cangas con el cuartel de la Guardia Civil de Cangas hizo temer que el incendio tuviera ahí su origen. De hecho, sus efectivos marcaban el perímetro de seguridad y ayudaban a la extinción del incendio. Solo cuando se disipó el humo ,que se extendía por parte de la playa de Rodeira y la avenida de Ourense, se podía divisar el verdadero origen del humo.

Intenso humo en la avenida de Ourense. | // G.NÚÑEZ

Fuera del ámbito de Rodeira, quien más quien menos en Cangas pensó que el humo estaba en relación con algún incipiente incendio forestal. Las sirenas de los vehículos del Grupo Municipal de Emergencias de Cangas, de la Policía Local y con posterioridad de los bomberos del Parque de O Morrazo alteraban a su paso el tráfico y las inquietudes de un miércoles de agosto con la niebla tapando la ría.

Un bombero trata de atajar el fuego desde el exterior. | // G.N.

El reloj aún no marcaba las 13.00 horas cuando se daba la alerta. El aviso, a la Axencia Galega de Emerxencias del 112, lo dieron los vigilantes de la caseta de socorrismo de la playa, próxima al lugar; y un particular. Fue necesario movilizar los servicios de extinción a causa de un incendio. Desde el 112 se alertó Bomberos de O Morrazo y de Vigo -estos últimos ya no llegaron actuar-, Policía Local, Protección Civil y una ambulancia. No hubo heridos, pero si ardieron dos estancias con material de windsurf del club, velas, tablas y arneses.

Interior de la caseta calcinada. | // G.N.

Los agentes de extinción accedieron al interior de la estructura tras romper una ventana y airear. Fuentes del operativo sitúan el origen del incendio en un cortocircuito en una nevera, que estaba enchufada en una regleta donde había también varios teléfonos móviles cargando, según señalan los efectivos que se encargaron de cubrir el incendio. Las casetas quedaron parcialmente calcinadas pese a la velocidad de actuación al ser una construcción de madera. Los efectivos de emergencia se vieron obligados a cortar la luz de todas las casetas del club y también el agua.

Sobre las 13. 30 horas quedó el fuego controlado y los bomberos y personal de emergencias del Concello se ocupaban en refrescar la zona. De hecho, cuando se consideraba que el incendio estaba apagado, volvieron a verse llamas en el tejado de una de las casetas. Así que se tuvo cuidado de que la zona quedara bien fría.

Las casetas que acogen este Club Náutico de Cangas son una concesión de Costas. Ayer se celebraba un campamento de vela en Rodeira, según manifestaban fuentes municipales. La prontitud con la que se actuó hizo que no hubiera riesgo para los usuarios de la playa de Rodeira, los miembros del club o aquellos que circulan por el carril bici que pasa muy cerca de las casetas. Durante la tarde, el Grupo Municipal de Emergencias regresó a la zona y se estaba a la espera de la investigación de la Policía Judicial, que será la que determinará todas las causas de este siniestro.