La Policía Local de Cangas detuvo ayer a un joven de 18 años por altercados callejeros en la zona de la “movida” y, posteriormente, a su padre, de 45, por salir en defensa de su hijo y enfrentarse a los agentes cuando estos realizaban las diligencias en la Jefatura.
Según fuentes policiales, los agentes patrullaban la zona de ocio nocturno cuando, en torno a las seis y media de la mañana, localizaron a un joven orinando en la calle Gondomar y le reprendieron su comportamiento, recibiendo insultos por ello y negándose este a identificarse, de forma airada, cuando fue requerido. Cuando los funcionarios insistieron, el chico intentó marcharse y ofreció resistencia, visiblemente alterado, y en el forcejeo resultó herido uno de los agentes, que fue atendido posteriormente de lesiones leves en el centro de salud de Cangas.
Tras ser detenido y conducido a dependencias policiales, los agentes avisaron a la familia del joven y a un abogado para asistirlo, y poco después se personó el padre del chico, de 45 años, que se encaró con los policías y también fue detenido acusado de insultos y desobediencia a la autoridad.
Siguiendo la versión oficial, el joven se encontraba ebrio y vomitó en la Jefatura, por lo que se dio aviso a una ambulancia del 061, cuyo personal valoró que podría padecer un coma etílico y optó por trasladarlo al hospital Povisa, de Vigo, escoltado por una patrulla de la Policía Local. Tanto él como su padre están citados para declarar por estos hechos, el martes en el Juzgado de Guardia de Cangas.
