Cangas ha brindado un recibimiento de altura a sus deportistas olímpicos. No estaban todos los que son, pero sí estaban todos los que son. Allí estaban Teresa Portela, Rodrigo Corrales y Rodrigo Germade, emocionados por las muestras de cariño y los aplausos de sus vecinos. Solo estuvo ausente el portero Iván Villar, que tras su reciente cesión al Leganés se encuentra ya en Madrid. El deportista dejó grabado un mensaje que se pudo escuchar en la explanada de Ojea y en el que agradeció el apoyo recibido.
El acto se desarrolló en la explanada contigua al Concello de Cangas, con un aforo restringido debido al COVID-19, y nada más llegar los deportistas se encontraron con el primer homenaje. Era una muestra de arte efímero, una alfombra encargada a la Asociación Alfombras de Bueu, en la que aparecían reflejados los aros olímpicos y el lema “O voso exemplo é ouro para Cangas”. Esa fue una de las ideas más repetidas en el coloquio posterior, en el que los tres deportistas cangueses hablaron de su experiencia en Tokio y del ejemplo que suponen para las nuevas generaciones. “Todo el mundo quiere las cosas ya y ahora. Pero no es así. Lo importante es trabajar y perseguir tus sueños, no se trata de cosa de un día”, decía la palista Teresa Portela, medalla de plata en K1-200 metros. Algo en lo que redundó el también palista Rodrigo Germade: “No hay que obsesionarse. Todo esto es fruto de un trabajo muy grande y es muy importante la constancia”. Y Corrales, que consiguió la medalla de bronce en un deporte de equipo como el balonmano, puso énfasis en la importancia “de aparcar los egos individuales y buscar el bien común”. El portero de Los Hispanos tuvo uno de los guiños más celebrados porque durante casi todo el acto vistió una camiseta del Balonmán Cangas, con el dorsal 36, que era uno de los que llevaba en su época en las categorías inferiores del club.
Junto a ellos estaban la alcaldesa de Cangas, Victoria Portas; el jefe del Servizo Provincial de Deportes de la Xunta de Galicia, Daniel Benavides; y el diputado Manuel González, en representación de la Deputación de Pontevedra. Todos coincidieron a la hora de señalar el potencial deportivo de Cangas y en que los cuatro deportistas que acudieron a las olimpiadas de Tokio son un “referente” para la sociedad en general y en particular para los más jóvenes.
El acto, que contó con la música tradicional de Tromentelo, concluyó con la firma en el libro de honor del Concello de Cangas. “Moitísimas grazas por este recibemento e todo o cariño do pobo de Cangas. Orgullosa de enriquecer a cultura deportiva do noso pobo”, escribió Teresa Portela. “Para mí es todo un orgullo firmar las páginas de este libro, poder llevar el nombre de nuestro pueblo por el mundo y firmar una página para la historia de nuestro amado pueblo”, puso por su parte Germade. Y por último Rodrigo Corrales dejó su firma con el siguiente texto: “Sempre foi un soño para min ser olímpico. Hoxe podo dicir con orgullo que ademais son medalla. Grazas de corazón á nosa fermosa vila. Por darme a oportunidade de medrar nas súas rúas. Por unha Cangas olímpica”.
