La Policía Local de Bueu investiga a un conductor que en la madrugada del viernes al sábado huyó de la patrulla que se encontraba de servicio y durante su escapada llegó a alcanzar velocidades de 150 kilómetros por hora en la PO-551 a su paso por el municipio. A la altura de Petís perdió el control de su automóvil al tomar una curva y acabó saliéndose de la vía, llevándose por delante parte de un cierre, varias señales de tráfico y ocasionando desperfectos en la valla quitamiedos. Después continuó su huida a pie, a través de la maleza y de las rocas de la playa de Petís.
La persecución comenzó alrededor de las 00.30 horas a la altura de la intersección de la PO-551 con la carretera hacia Meiro y Ermelo. La patrulla vio a un Nissan Almera blanco circulando en dirección a Bueu por lo que decidió acercarse para identificar al ocupante ya que estaba incumpliendo el toque de queda y los agentes querían comprobar si tenía una razón justificada. En cuanto el conductor percibió que el coche policial se acercaba y le daba luces para detenerse hizo todo lo contrario: acelerar a fondo e ignorar los requerimientos de la Policía Local.
Durante esa fuga por A Graña y las avenidas de Cangas, A Barca y Marín, siempre en sentido descendente, llegó a alcanzar velocidades de hasta 150 kilómetros por hora. Finalmente, no pudo controlar el coche antes de encarar una curva en Petís. Ayer en la calzada eran visibles las marcas de frenada a lo largo de más de 30 metros. El Nissan Almera que conducía se salió de la calzada por el margen izquierdo, pero eso no lo disuadió en su objetivo de intentar fugarse de los agentes. El hombre prosiguió su huida por las rocas y la vegetación de la zona. Durante esa escapada se dejó atrás varios objetos personales, como su teléfono móvil.
Varios delitos
Los agentes, que solicitaron la colaboración de la Guardia Civil, hallaron en el interior del automóvil dos perros, a los que trasladaba sin los sistemas de sujeción exigidos. El conductor se puede enfrentar ahora a varios delitos e infracciones, como saltarse el toque de queda; hacer caso omiso al requerimiento de la Policía Local para detenerse; conducción inapropiada porque en la mayoría del tramo de la huida la velocidad máxima está limitada a 50 kilómetros por hora; o ausentarse del lugar de un accidente de tráfico sin comunicarlo.
Fallece la mujer que sufrió un atropello Pazos Fontenla
La mujer de 73 años que sufrió un atropello el viernes a mediodía en el centro de Bueu falleció ayer en Pontevedra. Así lo confirmaron a última hora de ayer fuentes del Concello de Bueu. La vecina recibió el impacto de un coche cuando se disponía a cruzar en la calle Pazos Fontenla, en las inmediaciones de la farmacia de Banda do Río. En primera instancia fue atendida en el lugar del accidente y a continuación trasladada en ambulancia.
Detenido en Cangas por triplicar la tasa de alcohol y positivo en drogas
La Policía de Cangas detuvo ayer a un conductor de 33 años que circulaba de manera temeraria por Santa Marta. Fueron los vecinos los que alertaron a los agentes, que lo interceptaron en los alrededores de la capilla. En la prueba de alcoholemia arrojó una tasa de 0,75 (el triple de lo permitido) y además dio positivo en la de drogas. Por otro lado, Policía Local, Guardia Civil y la ambulancia del 061 acudieron ayer por la tarde al puerto deportivo después de recibir el aviso de que el vigilante había sufrido un posible infarto. El hombre fue trasladado al hospital Álvaro Cunqueiro en estado grave.
