La tercera ola del coronavirus ha cambiado el mapa de restricciones en la comarca de O Morrazo y en el nuevo decreto de la Xunta para frenar los contagios, Cangas, sin embargo, gana libertad en cuanto a movilidad, tras más de dos meses con cierre perimetral individual, al mejorar sus datos de incidencia de contagios y quedar entre los municipios gallegos con restricción medio-alta. Todo lo contrario que Moaña que pasa a engrosar la lista de 20 Concellos con nivel máximo en la que sigue Bueu desde el 16 de diciembre. El nuevo decreto aplica los dos niveles más altos de protección del protocolo contra la pandemia: medio-alto y máxima restricción. Cangas se queda en medio-alto, con una incidencia acumulada en los últimos 14 días entre 150 y 250 casos por cada 100.000 habitantes; y Moaña y Bueu con máxima restricción, con más de 250 casos por cada 100.000. Cangas tenía ayer en el mapa del Sergas 48 casos; Moaña, 58; y Bueu, 36, aunque las EOXI registran cifras más altas que este mapa.
Con el nuevo decreto, Cangas abandona, así, un cierre perimetral que mantenía desde el 4 de noviembre, aunque su población solo podrá moverse a los concellos que tienen su mismo nivel de restricción, pero no podrá acudir a Vigo porque esta ciudad junto a las de Pontevedra y Lugo, aunque con el mismo nivel medio-alto, quedan también con cierre perimetral.
Pese a esta apertura de Cangas, se recuerda que el municipio sigue en uno de los dos niveles más altos de restricciones en la comunidad por lo que la movilidad es solo para actividades esenciales como acudir al médico, al colegio, al trabajo –incidiendo en el teletrabajo, siempre que sea posible–, cuidado de mayores y menores y compra de enseres indispensables.
En Moaña, pese a que el mapa del Sergas indica 58 casos, la EOXI remitió ayer a la alcaldesa hasta 63 positivos activos, lo que implica un crecimiento de nueve casos en un solo día. La pandemia está disparada en el municipio desde las navidades y la hostelería pasa de unas semanas con un horario holgado a restricciones muy duras. La asociación de hosteleros de Moaña, en proceso de constitución, advierte de que gran parte de los locales decidirán cerrar sus puertas hasta que se relajen las normas ante las medidas que deben adoptar. “A muchos no nos compensará trabajar así”, develan. Y es que deben cerrar sus puertas a las 18.00 horas, cuando hasta hoy pueden atender hasta las 23.00 horas. Además, solo podrán servir en terraza y apenas al 50% de las mesas. “Muchos permanecerán cerrados, pero eso implica volver a enviar al Erte a los trabajadores, con el consiguiente gasto en gestorías. Es muy difícil sobrevivir con tanto cambio de normas”, concluyen los hosteleros.
La alcaldesa, Leticia Santos, participará hoy en la comisión de seguimiento telemática con responsables de Sanidade. Insistirá en pedir “un mayor control de los desplazamientos entre municipios. Llevamos pidiéndolos desde el cierre perimetral en noviembre, advierte. Además, reclama “una línea de ayudas directas a los hosteleros”.
Por otro lado, medio centenar de trabajadores del centro de salud de Moaña entre administrativos (PSX), doctores y enfermeros recibirán hoy su correspondiente vacuna contra el COVID-19, así como un centenar de sanitarios de Cangas. Serán el segundo y tercer lugar de O Morrazo al que llega la campaña de vacunación, tras las dosis puestas a los usuarios y el personal de la residencia de Aldán el pasado 30 de diciembre. En Bueu los sanitarios serán vacunados mañana.
Los datos facilitados ayer por la EOXI Pontevedra-O Salnés al Concello de Bueu apuntan que hay 42 casos activos, cuatro menos que la jornada anterior. Pese a esta tendencia a la baja desde la Alcaldía no se plantean solicitar un cambio al nivel de restricción medio-alto. “La evolución es positiva, pero hay que confirmarla y consolidarla en los próximos días. Hay que tener paciencia y tranquilidad”, afirma el alcalde, Félix Juncal, que pide a la población que acuda al cribado voluntario que comenzará mañana. Será en horario de 8.30 a 18.30 horas en As Lagoas y hasta el lunes.
En lo que respecta a la incidencia del COVID-19 en los centros educativos, los datos facilitados ayer por la Consellería de Sanidade reflejaban un total de 27 casos –tres menos que el día anterior– repartidos en catorce colegios e institutos.
