Venta de café para llevar desde la ventana, ayer, en una cafetería del centro de Cangas. | // GONZALO NÚÑEZ

La evolución de la pandemia en O Morrazo ha dado un vuelco en los últimos días, con una tendencia muy positiva en Cangas que encuentra su contrapartida en un crecimiento alarmante de casos en Moaña. Mientras el Sergas rebajó el riesgo en Cangas a alerta amarilla durante la mañana de ayer, el de Moaña sigue en alerta roja, tal y como comenzó la semana. Fuentes sanitarias explican además que el número de casos se está disparando entre los moañeses. Si el fin de semana comenzaba con más de 30 positivos activos, ayer ya se registraban 65 positivos. Solo en el último día se tuvo conocimiento de 16 contagios nuevos.

Alguno de los moañeses con Covid-19 se encuentran hospitalizados, aunque la parte positiva es que la inmensa mayoría se encuentra sin síntomas y superando el virus en su domicilio.

La cara de la situación es Cangas, que el pasado 3 de noviembre alcanzó un pico máximo de 86 positivos activos y en estos momentos apenas cuenta con 36 contagiados. La evolución ha sido muy positiva desde que la Xunta decretó el establecimiento de restricciones especiales hace menos de dos semanas en 60 concellos de toda la comunidad, incluido el cangués, obligando a un cierre perimetral del municipio, prohibiendo la apertura de los bares, cafeterías y restaurantes y reduciendo las reuniones sociales exclusivamente a los convivientes.

Ante la drástica mejoría de la situación en Cangas el alcalde, Xosé Manuel Pazos, ha anunciado que hoy mismo solicitará a responsables del Sergas, en una reunión telemática, que se levanten las restricciones especiales y se deje de penalizar así al sector de la hostelería.

“La situación está mucho mejor. Ya no tiene sentido seguir con las restricciones extraordinarias cuando tenemos menos positivos por Covid-19 que concellos limítrofes”. Entiende que no se debe “seguir castigando a un sector como la hostelería cuando no hay motivos para ello”. Pazos alega que con el establecimiento de medidas extraordinarias como el cierre perimetral “no fuimos beligerantes desde el concello, porque entendíamos que los datos sanitarios justificaban más restricciones. Igualmente, ahora entendemos que los datos permiten relajarlas”.

Desde el Concello de Cangas conceden que no se retiren las medidas extraordinarias de un día para el otro, “pero de cara al fin de semana debemos volver a las restricciones generales para toda Galicia”. Apunta, el alcalde, que en la situación actual será suficiente con las limitaciones de aforo y la obligatoriedad de mascarilla y distancia social en los bares y restaurantes, sin penalizar al sector más de lo necesario.

Cangas camina hacia las dos semanas desde el cierre perimetral y la previsión es que éste se prolongase hasta el mediodía del 4 diciembre. Sin embargo, el descenso en los datos de positivos ha sido poco menos que fulgurante. Tras el pico de 86 casos el pasado día 3, el doblegamiento de la curva es un hecho, con descensos diarios en el número de afectados. Justo una semana más tarde, el día 10, la cifra se redujo prácticamente a la mitad, con 47 positivos, y el concello abandonó la alerta roja en la que había estado para pasar al nivel naranja. Una semana más tarde la evolución se ha mantenido, permitiendo el paso a alerta amarilla pese a que todavía se contabilizan 36 casos.

La tendencia también es favorable en Bueu, que se mantiene en alerta amarilla al moverse por debajo de los 20 casos tanto en los datos de los últimos siete días como en los de los últimos 14. De todos los afectados seis de ellos permanecen ingresados en centros hospitalarios. El municipio buenense registró su momento más crítico hace apenas diez días, cuando entró en alerta naranja por un brote común que disparó la cifra de afectados a entre 20 y 25 al unirse a otro brote surgido en el Hospital Provincial de Pontevedra. Por entonces la detección de positivos alcanzaba los cuatro o cinco diarios, lo que hizo pensar en una próxima entrada en el nivel rojo de alerta. Sin embargo la minicrisis parece haber sido contenida y Bueu continúa navegando con una relativa tranquilidad dentro de la pandemia.

Una docena de estudiantes

Cerca de una docena de alumnos del IES Rodeira se han “autoconfinado” al haber estado en contacto con un compañero positivo. Demandan del centro que notifique al Sergas sus datos como contactos estrechos y que no les contabilicen como faltas las ausencias de clase.

Hasta ocho alumnos moañeses tienen coronavirus

La escalada de contagios en Moaña afecta también a los centros educativos. Hasta ocho niños del municipio se encuentran contagiados en estos momentos. El foco registrado en las últimas semanas en el CEIP Domaio crece con dos nuevos contagiados. Son seis los pequeños del centro que dieron positivo en las pruebas PCR. Se le suma un nuevo contagiado en Moaña en el CEIP Quintela, además del caso registrado a comienzos de semana en la escuela infantil Dalila. A nivel comarcal se mantiene el número de 12 positivos entre la población escolar. Si la situación empeoró en Moaña, mejoró en Bueu, en donde ya no hay ningún centro con casos activos de Covid-19. Superaron el virus los dos últimos alumnos, que están matriculados en el instituto Johan Carballeira y en el colegio Virxe Milagrosa. En Cangas, por su parte, la situación también mejoró ligeramente con respecto al comienzo de semana. Ayer se mantenían activos cuatro casos: Uno en Nazaret, otro en el colegio Eduardo Pondal, un tercero en el IES Rodeira y un cuarto en el Monte Carrasco. Se superó el caso del IES María Soliño.