La Policía de Cangas, junto a la ayuda de un vecino y de un velero, ha logrado recuperar esta mañana una lancha que se había soltado de sus amarras en la playa de Menduíña. El barco, de la séptima lista y de unos cinco metros de eslora, estaba fondeado en esta zona de la ría de Aldán y por razones que se desconocen se soltó de sus amarras y estaba a punto de irse contra las rocas. Uno de los agentes se metió en el agua junto al alertante y en un primer momento lograron volver a fondearla en uno de los muertos de la playa.

Sin embargo, enseguida comprobaron que se empezaba a hundir por la popa debido al agua que se había acumulado en su interior. Con la ayuda de un velero la engancharon y la acercaron a la orilla. Para sacarla del agua tuvieron que meterse de nuevo en el mar y poder arrastrarla a la arena. Justo en ese momento llegaba el propietario, que tendrá que hacerse cargo de la retirada de la playa.