El gesto de la Cofradía de Aldán de pagar inconscientemente la multa por ese lote de almeja que no daba la talla mínima, le ha valido para no recibir una ayuda que estaba establecida desde hace años, según fuentes del sector, para hacer frente a los gastos de vigilantes y biólogos, "realizando un trabajo que es de la Administración, tal como es preservar y cuidar los recursos frente al furtivismo". Añaden que este personal que paga las cofradías trabaja como guardapescas en colaboración con los guardacostas de la Consellería de Mar y en este sentido "las cofradías asumen gastos de la consellería"

Los pósitos afectados con este "castigo" han presentado un recurso. Parece ser que el Ministerio de Pesca había remitido en febrero de 2017 una comunicación a las comunidades autónomas advirtiendo la aplicación del reglamento de 2014 de fondos europeos. La sensación en el sector es que quedó en los mandos intermedios. El patrón mayor de Aldán reconoce que nadie les dijo las "consecuencias desproporcionadas" que tendría pagar una sanción.