Los afectados por las obras del Tramo de Concentración de Accidentes (TCA) que promueve la Consellería de Infraestruturas entre Lapamán y Bueu empezarán a recibir en breve la respuesta a sus alegaciones. No obstante, desde el departamento autonómico ya han adelantado su posición con respecto a uno de los elementos más significativos: la construcción de una rotonda en Castrelo. Desde Infraestruturas adelantan que los técnicos han aceptado la petición del Concello de Bueu, que proponía desplazarla para acometer su construcción a la altura del vial de salida de las playas de Agrelo y Portomaior. Este cambio no significará un nuevo proceso de información pública, tal como se especulaba inicialmente, y la previsión es que el proyecto se pueda licitar en la primavera.

El TCA de la PO-551 en Bueu recoge la construcción de dos rotondas: la primera a la altura del cruce de la playa de Lapamán y la segunda en Castrelo, a la altura de un vial municipal. Desde el ayuntamiento se planteó a la consellería la posibilidad de mover esa segunda glorieta y construirla apenas 100 metros más abajo en dirección a Bueu, justo a la salida del ramal que sube desde Portomaior. En ese punto la consellería preveía la construcción de lo que se denomina una "raqueta", para ordenar el tráfico en esta zona y facilitar los cambios de sentido. La alegación municipal planteaba unificar esas dos actuaciones en una sola porque se mejoraba el tráfico en este punto y se evitaba la afección a un importante grupo de parcelas que forman parte de un polígono urbanístico recogido en el PXOM, que a su vez ya prevé otro vial interior. Finalmente se ha tomado en consideración este planteamiento.

Lapamán

El Concello de Bueu también planteaba desplazar la rotonda de Lapamán, acercándola hacia el límite del término municipal de Marín. De momento la consellería y la Axencia Galega de Infraestruturas (AXI) no han avanzado cuál es la solución adoptada, aunque todo parece indicar que se mantiene la ubicación prevista. En su momento se había advertido que era "complicado" acceder a esa petición.

Durante la fase de exposición pública se presentaron un total de 19 alegaciones. La AXI ya manifestó que algunas no se podrían atender, como la petición del Concello de Bueu de extender la senda peatonal prevista en Lapamán -de 250 metros de longitud- para que conectase con las aceras de Portomaior. Esa obra, apuntaban, formará parte de otro proyecto. Desde la Xunta avanzan que sí atenderán una petición del Concello de Marín para mejorar una intersección situada en el punto kilométrico 7+300. "Está fuera del ámbito del TCA, pero muy cerca y nos parecía razonable atenderla", señalan.

El proyecto constructivo ya está concluido, según apuntan desde Infraestruturas, y en estos momentos se encuentra en fase de revisión. El coste final es de 1,1 millones de euros y está previsto que el contrato de obra se pueda licitar durante la primavera.

La ley de contratos públicos fija un plazo de unos cuatro meses desde la licitación hasta la adjudicación en firme. Esto significa que con toda probabilidad los trabajos en el TCA entre Lapamán y Bueu comenzarán después del verano.