Con olas entre los 4 y los 6 metros, los percebeiros de Cangas arriesgan sus vidas por conseguir el preciado marisco que ayer se pagó en la lonja canguesa a 154 euros el kilo, un precio con el que está contento el sector. Fue el precio de la primera parada que marcó la distribuidora Makro en la subasta para hacerse con los mejores 96 kilos de los 180 totales de percebe que se expusieron sobre las mesas de la cofradía. La Navidad está muy cerca y el precio del percebe, muy demandando, ha empezado a subir.
En este mes, y debido a las duras condiciones meteorológicas, los percebeiros de Cangas solo habían podido acudir al mar en tres ocasiones. El lunes bajaron por los acantilados de la Costa da Vela, en donde trabajaron con olas de 4 metros y consiguieron casi el cupo máximo de 7 kilos por cabeza; y ayer volvieron a hacerlo, con la marea baja por la tarde, pero ya con olas de 6 metros que prácticamente les impidieron trabajar. Es más, uno de los marineros se cayó en la faena y se dislocó un hombro por lo que tuvo que ser trasladado por los vigilantes del plan.
La jornada de hoy, aunque mejoran algo las condiciones meteorológicas, será complicada para el sector por la mala coincidencia de la marea baja, muy temprano por la mañana y muy tarde, a última hora, ya que a las seis de la tarde ya prácticamente no hay luz para poder trabajar, asegura el presidente de los percebeiros de Cangas, Fernando Mariño.
En la cofradía canguesa confían en que los precios sigan subiendo a medida que se acerca más la Navidad.
En el caso de Bueu, el percebe ha alcanzado esta semana precios en el umbral de los 150 euros, una cotización que desde la cofradía consideran muy positiva. El mal tiempo y el mar de fondo impidieron a los percebeiros salir a trabajar ayer y ya han solicitado a la Consellería do Mar autorización para poder salir a trabajar el sábado, una posibilidad que se contempla el plan de explotación. El sector está trabajando en la zona de Liñeiros, situada en la parte exterior de la isla de Ons, y con cupos de 7 kilos por persona.
El percebe no es el único recurso que ha experimentado un aumento en el precio de la cotización a las puertas de las fiestas navideñas. Uno de los productos estrella es la centolla, que estos días se vendió a casi 39 euros el kilo. La navaja es otro de los mariscos que más se cotiza en estas fechas y su precio medio, que habitualmente no llega a los 10 euros, se sitúa en estos momentos cerca de los 17 euros el kilo. Por su parte, la almeja se vendió a cerca de los 12 euros el kilogramo.
Ayer el mal tiempo obligó a la mayoría de la flota a permanecer amarrada a puerto. Los únicos que pudieron salir a trabajar fueron precisamente los barcos dedicados almarisqueo, a la navaja o al erizo, otra de las especies que cuenta con un importante tirón comercial.
