La Dirección Xeral de Patrimonio Cultural publicó ayer la resolución del expediente de catalogación de los astilleros tradicionales de Carlagho y Casqueiro, ubicados en el centro de Moaña. Tras un año y medio de estudios técnicos, desde el departamento de la Xunta acordaron catalogar y conceder la protección ambiental a estas estructuras, aludiendo a los artículos 8.3 y 91.3 de la Lei do Patrimonio Cultural de Galicia. Eso sí, en el Anexo II de la resolución establece condiciones para su protección entre las que señala que deben garantizarse la compatibilidad entre la zona de servidumbre de seis metros de la franja litoral y el propio uso de los astilleros, que deberá mantener "o seu contacto funcional co mar, a través de guías ou da solución técnica que se poida habilitar para o efecto".

En este sentido, Patrimonio alude al criterio para rehabilitar el astillero de Casqueiro, que fue objeto de un incendio intencionado hace un año y del que solo permanecen en pie los muros perimetrales de cantería, pero determina que se debe garantizar las condiciones indicadas en su rehabilitación, salvaguardando "os seus valores culturais". Patrimonio señala que serán autorizables las actuaciones que prevean el "desmonte dos últimos seis metros de edificación, e así mesmo, a continuidade do paseo poderá realizarse pola fronte marítima, compatibilizándoa co nivel das edificacións que se deben manter" y garantizando soluciones compatibles con la salida y el contacto con el mar.

Tal y como había anunciado al responder a las alegaciones del Concello, Patrimonio deja fuera de la protección a todos los inmuebles cercanos a los astilleros, y que carecen de valor histórico, protegiendo solo las estructuras de Carlagho y Casqueiro y la estructura anexa que en la actualidad está siendo usada como vivienda y que en su origen tenía relación con la actividad de las carpinterías de ribeira. Se propone un contorno de protección limitado a los espacios públicos inmediatos a las carpinterías.

En total, en los últimos meses los técnicos tuvieron que estudiar y responder hasta 90 alegaciones y aportaciones de documentación a un proceso de catalogación abierto en diciembre de 2016 a instancias de la Asociación Recreativa e Cultural Sueste, que emplea estas carpinterías en su actividad de recuperación de embarcaciones tradicionales y difusión de la cultura marítima. La mayoría de las alegaciones se centraban en retirar de la protección a los edificios particulares de la zona, y otras se manifestaban directamente en contra de cualquier tipo de protección, como las que presentaron desde la Plataforma que lucha por la finalización del paseo de Seara por el borde litoral.

Desde el Concello se pronunció el concejal de Urbanismo, Odilo Barreiro, quien valora positivamente "que se proceda a protexer os estaleiros. Agardamos que pasen canto antes a titularidade municipal para poder rehabilitarlos". En este sentido prometió, tal como se acordó en Pleno, crear una mesa de trabajo para estudiar alternativas que reformen "toda a zona, non só os estaleiros e o paseo". Con las conclusiones de dicha mesa se dirigirán a las dos administraciones que ahora tienen competencia sobre el área: Costas del Estado y Patrimonio.

La interpretación del bipartito es que Patrimonio no obliga a retranquear los muros del astillero de Casqueiro los seis metros de la zona de servidume, "só o contempla como unha opción que se pode pedir, pero pódese resolver a finalización do paseo doutros xeitos".

Barreiro concluye señalando que la protección acordada quita la razón "aos que reclamaban a demolición destas carpinterías de ribeira tradicionais" y aguarda que "sexa o punto final do enfrontamento veciñal que se provocou con este asunto.