La ansiada ampliación del Museo Massó de Bueu no tiene todavía fecha. Aún así eso no impide que desde la dirección del museo se sigan completando etapas para cuando llegue ese momento. La primera fue la elaboración del plan museológico, un documento en el que se hace un pormenorizado análisis del espacio, de sus necesidades y puntos fuertes, entre otros aspectos. Este trabajo resulta imprescindible antes de cualquier intervención en el edificio. El segundo paso está a punto de completarse ahora: antes de final de año se remitirá a la Consellería de Cultura el programa arquitectónico, un documento que será la guía que marque las directrices del futuro proyecto arquitectónico de la ampliación.

La dirección del Museo Massó tiene claro cuál debe ser el espíritu de esa futura ampliación: la antigua fábrica conservera y los espacios que ocupó. Esta intención ya se avanza de alguna manera en la guía oficial del museo, publicada el año pasado, y que se titula "El museo que creció dentro de una fábrica de conservas". Lo que se plantea en este plan arquitectónico es recuperar las antiguas naves de la fábrica, como la de atadores o la salazón, e incorporar la historia del edificio y de la factoría al propio recorrido museístico. La conservera y el museo en realidad forman parte de un todo y no sería posible entender una parte sin la otra. "El museo quiere recuperar la memoria de la fábrica y el edificio es fundamental para ello", sostiene la directora, Covadonga López de Prado.

El programa arquitectónico realiza una valoración histórica del edificio, las necesidades que están cubiertas o las que hay que atender de cara al futuro. La propuesta que se hace a través de este documento pasa por rehabilitar la antigua fisonomía de la planta baja y concentrar en esta zona todo los relacionado con la historia de la fábrica y el mundo de la conserva. Mientras, la segunda planta mantendría una filosofía similar a la actual y a la del antiguo museo. Aquí se expondría la colección que no está directamente relacionada con el mundo de la conserva, como los fondos y objetos relacionados con la historia de la navegación.

El borrador de este programa arquitectónico ya está concluido y antes de finalizar el año está previsto entregar a la Consellería de Cultura el documento definitivo con las líneas generales que se deberían recoger para la futura ampliación de un museo que nació de una fábrica de conservas y que creció en su interior albergando una colección repleta de joyas históricas.

El legado cultural del museo y de la empresa Massó Hermanos será precisamente el eje de una conferencia que impartirá la directora del Museo Massó en el centro de día Tendelaman el próximo miércoles a las 16.30 horas.