Todavía es posible comprar con pesetas en O Morrazo. Desde ayer, distintos establecimientos de Cangas,_Moaña y Bueu aceptan pagos en esta moneda desaparecida hace ya cerca de una década. El motivo, una campaña de la Federación de Comerciantes e Industriais do Morrazo (Fecimo) que persigue dar la oportunidad a los clientes de deshacerse de las pesetas que todavía tienen en casa. Paralelamente, se busca transmitir a los consumidores un atractivo promocional que incentive la realización de compras en los establecimientos comerciales adheridos a la iniciativa, tal y como explican desde Fecimo.

Uno de los establecimientos más madrugadores fue la librería Miranda de Bueu. Recibió el material de la campaña a primera hora de la tarde y poco después recibía las primeras pesetas. El propietario del negocio, Fernando Miranda, señala que dos clientes adquirieron sendos libros pagando parte del importe con esta moneda. El primero de ellos se presentó en la librería con 3.000 pesetas en monedas de 25 y aprovechó para pagar con ellas parte de los 29,90 euros que cuesta el libro "Un mundo sin fin", de Ken Follet. Además de las 125 monedas de 25 pesetas tuvo que desembolsar 11,87 euros por un libro que regalará en Reyes.

La otra compra también fue un libro, aunque en esta ocasión no fue adquirido para regalar. Una joven se personó en el local con un bote en el que había 2.134 pesetas en monedas de todo tipo: 1, 5, 10, 25, 50 e incluso 500 pesetas. Tuvo que completar el importe del libro, que ascendía a 19,90 euros, aportando un total de 7,07 euros.

Y es que la campaña permite los pagos mixtos en pesetas y euros, además de aceptar los billetes editados a partir del año 1939. Los metales válidos figuran en los folletos y carteles que Fecimo repartió entre sus asociados y que están a disposición de los clientes.

Gran acogida

Los comerciantes hasta el momento acogieron con entusiasmo la campaña y se muestran convencidos de que va a ser un éxito. Reconocen que está despertando un gran interés entre los clientes y que muchos de ellos ya les adelantaron su intención de pagar con esta moneda. "Tengo una camisa empaquetada y su propietaria me dijo que cuando la venga a recoger me va a pagar con pesetas que tiene por casa", indica Eva María Álvarez, propietaria de la tienda de ropa masculina Evita y punto, en Moaña.

De forma similar se expresa Benxamín Riobó, que regenta la librería O Pontillón de Moaña. "É habitual que a xente comente que ten pesetas na casa e que non sabe onde cambialas", señala. Riobó considera positivas todas las iniciativas que permitan "sacar da casa os cartos que están parados; nestes tempos de crise non se pode escatimar nin unha peseta", afirma.

Además del material informativo y una calculadora conversora para los establecimientos participantes, Fecimo sorteará entre ellos una estancia o un viaje valorado en 300 euros.

Recuperar las pesetas puede ser un buen remedio contra la crisis económica, o eso es al menos lo que piensan en la Federación de Comerciantes e Industriais do Morrazo (Fecimo). Ayer echó a andar la campaña "Ata a última... no Morrazo", que va a permitir a la desaparecida peseta recuperar su protagonismo de antaño. Y es que los establecimientos asociados a Fecimo que así lo deseen podrán aceptar esta moneda hasta el 7 de enero. En Bueu fueron los más madrugadores y ya se registraron varios pagos en este metal. En Cangas y Moaña esperan el despegue de la iniciativa.