Iciar Troncoso / O MORRAZO

La crisis económica que padece toda España afecta también a O Morrazo. El sector hotelero es uno de los grandes perjudicados. Los empresarios de la comarca se quejan, en su mayoría, de la caída en los beneficios durante julio.

Haciendo una comparativa con el verano pasado muchos de ellos afirman haber tenido "mucha menos clientela". Otros, sin embargo, declaran haber obtenido "más huéspedes de los esperados. Así lo declara Pablo, del Hotel Airiños de Cangas, que junto al Hotel Jucamar, son los establecimientos que mayor número de estancias ha acumulado en la comarca este mes pasado.

Uno de los cambios más significativos con respecto a años anteriores es la reducción en las estancias. Tal y como explica el gerente del Hotel Prado Viejo, de Moaña "hay un cambio en los hábitos de la gente. El nivel de vida ha bajado y ahora, en vez de quedarse una semana, se quedan dos o tres días, no más". El hotel moañés no ha sido el único que ha notado la disminución de días de vacaciones por parte de sus clientes. Desde el Hotel-Restaurante Doade, en O Hío, afirman que "la media de estancia este año es de cuatro días. Hay quien se queda seis, pero la mayoría, entre dos y tres días". Por su parte, el gerente del Jucamar, que aseguró rondar el 100% de ocupación en julio, también destacó que "las estancias se van reduciendo un poco, por la economía, que no está bien", afirma. Lo cierto es que la crisis económica ha sido el factor fundamental. "La gente viene buscando playa y con el mal tiempo hemos tenido alguna que otra cancelación. Pero el factor decisivo de la poca ocupación de julio ha sido la mala situación económica", declaran desde el Hotel Incamar, en Bueu.

En cuanto a las casas rurales, que desde hace unos años se han constituido como uno de los alojamientos más reclamados para las vacaciones familiares, también han notado la crisis. Puri, de la Casa Rural O Canastro, en Moaña asegura que "este verano hemos tenido un bajón considerable. En julio estuvimos al 50% de ocupación. Sólo en el puente del 25 conseguimos llenar todos los apartamentos". Puri afirma que durante el puente, tuvo que enviar gente a otros hoteles "porque no teníamos más habitaciones. En Moaña estaba todo completo y los tuve que mandar a Cangas. Pero fue lo único bueno del mes, "asegura. Por su parte, Rosa, de Casa Videira, en Bueu, reconoce que aunque esperaban recibir a más gente, "dentro de lo que cabe tenemos que estar contentos porque hay compañeros que han estado vacíos". Rosa explica que se ha notado el bajón que, según su opinión, es "por la crisis económica. El mal tiempo también ha jugado su papel, pero yo creo que secundario".

Perfil del visitante

En cuanto al perfil del turista también ha cambiado. La gente joven no dispone de suficiente dinero para irse de vacaciones. Por lo tanto, las familias se han convertido en los principales clientes de los establecimientos morracenses, algo en lo que coinciden todos los hoteleros de la comarca.

El turista procede sobre todo, y según cuentan los hoteleros, de diferentes zonas de la Península. "Tenemos a gente de Madrid, Valencia o País Vasco", afirma Puri de O Canastro. En el Doade, también es significativa la afluencia de visitantes del norte. "Hay mucho asturiano", afirman. En el Don Hotel, por su parte, afirman que "la mayoría son de Madrid, Barcelona o el sur. Gallegos hay pocos, alrededor de un 15%".

Expectativas para agosto

Después de este "insípido" mes de julio, los hoteleros de la zona esperan que agosto les resuelva el verano. "Por naturaleza agosto siempre es mejor. La primera quincena siempre es buena, llueva o no", declara el gerente del Hotel Prado Viejo. El Hotel-Restaurante Doade, por ejemplo, que en julio obtuvo un 80% de ocupación, en agosto, ya tiene el 100% reservado. Igual que él, los hoteles Bueumar y Don Hotel, que aseguran tener un lleno en la primera quincena del mes.