El verano se ha presentado de improviso en O Morrazo. El calor ha querido dar un pequeño anticipo y la comarca vive un fin de semana más típico de la época estival que de la primavera, con máximas que llegaron a los 28,2 grados poco después de las tres de la tarde.

El día de ayer tuvo todos los ingredientes del verano. Sol, playa, terrazas, paseos y tráfico. Si el viernes se alcanzaron los 29,2 grados y sólo unos pocos se atrevieron a disfrutar de la bonanza meteorológica en la playa, ayer se notó que el día no era laborable y fueron más quienes quisieron adelantar el verano desempolvando sombrilla, toalla y bañador. Más de uno apostó, también, por darse el primer baño de la temporada. Así, arenales como el de Rodeira presentaron un buen aspecto durante toda la tarde.

En las terrazas no hubo tanta timidez y registraron un lleno en las horas punta, ya que nadie quería desaprovechar la oportunidad de tomar un refresco viendo pasar el mundo. Montero Ríos y Eugenio Sequeiros, en Cangas, se inundaron de gente y las habituales zonas de paseo en los tres concellos también contaron con una importante afluencia de gente a última hora de la tarde. El buen tiempo se acaba hoy según las previsiones, que recogen un aumento de la nubosidad.