Al servicio de transporte de ría le está costando este año despegar con fuerza y desbancar a la utilización del coche para viajar entre Vigo y la comarca de O Morrazo. Así, los datos aportados por la Autoridad Portuaria indican que durante el primer semestre de 2005 se perdieron 8.672 usuarios. En total, el número de pasajeros descendió hasta los 429.502 frente a los 438.174 del mismo periodo del pasado ejercicio.
La cifra supone una disminución del 2,33 por ciento debido a la reducción de pasajeros registrada en los meses de febrero, marzo y abril. Sin embargo, la situación deja una pequeña luz de esperanza ya que en enero, mayo y junio hubo un incremento de usuarios con respecto a los últimos ejercicios, una tendencia que se puede consolidar durante el periodo estival.
Así, en junio de este año se alcanzaron los 84.475 pasajeros, con una subida importante respecto al mismo mes de 2004 (82.795 usuarios) y en comparación con junio de 2003 (76.978). De proseguir el aumento en lo que resta de verano, la naviera Mar de Ons podría cerrar el estío con más de 400.000 personas transportadas.
De momento, es imprevisible saber si el pasaje aumentará o disminuirá. No obstante, el buen tiempo y las caravanas de coches que fundamentalmente los fines de semana se generan en la PO-551 pueden contribuir a que el uso del barco aumente durante el resto del verano. También ayudará, en parte, la implantación del billete combinado que entró en funcionamiento recientemente y que permite pagar con una misma tarjeta el autobús urbano de Vigo y el viaje en barco.
En la actualidad , el billete sólo de ida entre Cangas y Vigo cuesta 1,75 euros, exactamente un 16,6 por ciento más de lo que se pagaba en el verano de 1999 cuando los viajeros tenían que desembolsar 1,50 euros.
Desde la concesionaria han asegurado siempre que los incrementos han obedecido al aumento del Índice de Precios al Consumo (IPC) así como a las subidas registradas en el precio de carburante. Sin embargo, por parte de los usuarios se ha visto con recelo el incremento año tras año del billete a la espera de que se congelase el coste en un ejercicio para no hacer sufrir más a la economía familiar.
El coste del servicio no es la única preocupación. El futuro del transporte de ría a cargo de la empresa Mar de Ons sigue en el aire ya que el Tribunal de Justicia de la UE sigue sin emitir su dictamen sobre la legalidad o no de la explotación del servicio en régimen de monopolio.
En junio de 2002, un informe de la Comisión Europea declaraba que el servicio era "ilegal" ante lo que decidía denunciar al Estado Español ante instancias jurídicas europeas.
El problema radicaba en que la Comisión Europea entendía que debía haber libre competencia en el transporte marítimo y no una actividad de monopolio que la Xunta dejó en manos de la empresa Mar de Ons tras un concurso público al que optaron varias compañías.
