- Algún futbolista suyo manifestó que si había que quedar eliminado, que mejor escenario que Pasarón para tener el recuerdo de haber jugado en un campo con tanta historia.
- Así es. Es un choque de David contra Goliat, pero que nos quiten lo bailado. Vamos a disfrutar. Hace mucho tiempo que no voy por Galicia y cuando lo hice de futbolista no se me dio mal. Me gustaba ir allí por todo lo que suponía. Un equipo modesto como nosotros ya disfruta con solo poder estar dos días juntos en el autobús y en el hotel. Es un premio a toda la campaña y por eso no tenemos ninguna presión. Ojalá la tuviéramos, o tuviésemos el presupuesto del Pontevedra. Nuestra única baza es la ilusión con la que afrontamos la eliminatoria y hay que recordar que toda la presión recaerá encima de ellos.
- ¿Alguna clave en especial de cara al encuentro?
- Trataremos de que no nos marquen muy pronto, porque si lo hacen lo vamos a pasar muy mal. Sería ideal acabar la primera mitad con empate, eso nos daría opciones a seguir en la competición. Solemos ser un equipo que no encaja muchos goles, pero cada partido es diferente y nunca se sabe lo que puede suceder durante los noventa minutos.
- ¿De superar esta eliminatoria que es lo que espera del equipo?
- Quedan noventa minutos de juego y no se pueden adelantar los acontecimientos. Al finalizar el partido en Manzanares dijimos que estábamos en una nube, pues imagínese lo que puede suceder si seguimos adelante. Ya llevamos muchos días de fiesta, pero eso sería algo espectacular, pues creo que pasaríamos a la historia del club, ya que es la mejor temporada de toda la historia.
