Guerra en Ucrania

Corea del Norte envió 6.700 contenedores con munición a Rusia, según Seúl

La noticia llega después de que Volodímir Zelenski, líder ucraniano, aclarara de nuevo que urgen más las balas que los aplausos

Kim Jong Un y Vladimir Putin en una imagen de archivo.

Kim Jong Un y Vladimir Putin en una imagen de archivo. / EP

Adrián Foncillas

No hay comercio más complementario hoy en el mundo: tantas armas necesita Rusia como alimentos Corea del Norte y en esa certeza descansa el trajín de contenedores. Seúl ha contado 6.700 desde septiembre en sentido Pionyang-Moscú. Probablemente no será decisiva la contribución norcoreana al conflicto pero tampoco será despreciable. En un país de PIB ridículo y hambrunas cíclicas no hay industria más engrasada ni mimada que la militar.

Esos miles de contenedores podrían cargar con tres millones de proyectiles de artillería de 152 mm medio millón de 122 mm, calcula Corea del Sur. “Probablemente sea una mezcla de las dos pero podemos decir que varios millones de municiones han sido enviadas”, ha revelado Shin Won-sik, ministro de Defensa. Ha aclarado que las fábricas que sirven a Rusia funcionan “a toda marcha”, en contraste con los parones y la producción afeitada del resto por los cortes eléctricos y la falta de suministros.

La noticia llega después de que Volodímir Zelenski, líder ucraniano, aclarara de nuevo que urgen más las balas que los aplausos. Esta semana lamentó que sólo ha recibido el 30% del millón de proyectiles que la Unión Europea se había prometido a enviar a principios de marzo. También languidece el entusiasmo estadounidense en un conflicto que, entrado ya en el tercer año, acumula indicios inquietantes para Kiev.

Pionyang y Moscú han negado el intercambio de armas a la vez que celebraban su mayor cooperación militar. Las imágenes satelitales han revelado el tránsito entre el puerto norcoreano de Najin y el ruso de Dunay, separados por apenas 200 kilómetros. Seúl sostiene que la cumbre en Rusia de Kim Jong-un Putin avivó el ritmo. Corea del Norte ha recibido en este tiempo unos 9.000 contenedores, un 30% superior a los que ha enviado, según las cuentas surcoreanas. Están cargados principalmente de comida que le sirvió a Pionyang para estabilizar los precios.

Cooperación tecnológica y alimentos

De Moscú también recibe los conocimientos tecnológicos para avanzar en su carrera militar. No parece casual que, poco después de aquella cumbre, Corea del Norte lanzara con éxito su primer satélite espía tras sus fracasos previos. Shin ha desvelado a la prensa surcoreana que Pionyang está preparando el lanzamiento de otro misil para los próximos días tras haber solicitado a Moscú asistencia tecnológica en el traslado de maquinaria pesada. La cooperación, pues, no sólo afecta al conflicto ucraniano sino que aumenta el riesgo en Extremo Oriente cuando Pionyang ha roto las relaciones con su vecino del sur.

Antony Blinken, secretario de Estado, ya advirtió en su gira asiática de la “creciente y peligrosa relación” entre Rusia y Corea del Norte. Moscú ejerció de muleta diplomática y económica en el siglo pasado y el contexto ha devuelto la cercanía. También acusa Washington a Pionyang, una piedra en el zapato durante décadas, de haber armado a Hamas con los lanzagranadas usados en su ataque a Israel.

Sin diálogo con EEUU

El flotador ruso le alivia el drama económico a Pionyang, tan castigada como Moscú por las sanciones internacionales. También se aleja el diálogo con Estados Unidos mientras mantenga su sintonía con Rusia. Aquellas negociaciones entre Donald Trump y Kim Jong-un por la desnuclearización norcoreana terminaron con muchas fotos para la hemeroteca y ningún fruto. Joe Biden no ha conseguido que Kim le descuelgue el teléfono y ahora, en año electoral, se le supone más acuciado por Ucrania o Irán. Un regalo simboliza los nuevos tiempos: la limusina Aurus que Putin le envió esta semana a Kim para celebrar su amistad y compromiso.