El régimen de Pionyang confirmó ayer la destrucción de la oficina de enlace intercoreana como parte de su decisión de "interrumpir todas las líneas de comunicación" entre ambos países. La confirmación se anunció horas después de que desde Seúl se informara de la destrucción de esas instalaciones.

"La oficina conjunta entre el Norte y el Sur quedó completamente destruida", dice el texto de la agencia oficial. "Ya hemos interrumpido todas las líneas de comunicación entre ambas partes coreanas", agrega la información. La destrucción de esa oficina fue anunciada en Seúl por el Ministerio de Unificación. Pionyang ya había amenazado con destruir esta simbólica oficina en el marco de su reciente subida de tono contra Seúl, por el envío de globos con propaganda contraria al régimen por activistas desde el Sur.