El alcalde de Moscú, Serguéi Sobianin, cifró ayer en 300.000 el número real de infectados con el coronavirus en la capital rusa frente a los 92.676 que muestran los datos estadísticos, y decidió por ello prolongar ayer hasta el 31 de mayo el confinamiento. Su decisión coincidió en el tiempo con el registro de más de 11.200 nuevos casos en todo el país en 24 horas, batiendo el récord diario de contagios y elevando el balance oficial a más de 177.000 personas contagiadas y 1.625 víctimas mortales.