Llegó el Supermartes. Los demócratas celebrarán hoy primarias en 14 estados y un territorio (Samoa), en los que se disputan, por sistema proporcional, 1.344 delegados para la convención presidencial. Súmense los trece que, desde hoy hasta dentro de una semana, elegirán los demócratas del exterior y se tendrá un tercio largo de los 3.979 compromisarios que en julio decidirán el nombre que se medirá con Trump en las presidenciales de noviembre.

Los candidatos llegan a la cita de hoy -cuyas joyas son California (415 delegados) y Texas (228)- tras haber librado cuatro batallas en un mes: Iowa, Nuevo Hampshire, Nevada y Carolina del Sur. Estas cuatro primarias sólo han atribuido 155 delegados, pero han despejado el panorama de un partido dividido entre un ala radical y otra centrista.

De los doce aspirantes que se estrenaron en los caucus de Iowa, solo dos conservan sus posibilidades: el senador socialista Bernie Sanders (60 delegados) y el exvicepresidente centrista Joe Biden (54). Los demás no han puntuado o, como es el caso de la senadora izquierdista Elizabeth Warren (8) y la ya retirada centrista Amy Klobuchar (7), se han desfondado ante Sanders y Biden.

Figura aparte es el joven centrista Pete Buttigieg, quien tras un arranque fulgurante en Iowa perdió gas en Nuevo Hampshire y Nevada, para hundirse este sábado en Carolina del Sur y anunciar el domingo su retirada en favor de Biden. Buttigieg, de 38 años, ha comprobado que no tiene el favor de latinos y afroamericanos, y esperará a 2024.

Una trayectoria del todo contraria a la suya ha sido la de Biden, quien tras pinchar en los dos primeros actos se benefició del apoyo latino en Nevada y, gracias a los afroamericanos, arrasó el sábado en Carolina del Sur (39 de 54). Biden es ahora mismo el paladín del centro, aunque hoy entra en juego el último competidor que puede hacerle sombra: el magnate Mike Bloomberg, ausente de las citas anteriores. Bloomberg ha optado por jugarse 500 millones a todo o nada y necesita una buena cosecha para seguir en la carrera.

Lo malo es que los sondeos no se la garantizan. De los doce estados para los que hay promedios, Sanders se impondría en ocho, incluidos California y Texas, y sería segundo en otros dos, por lo que hoy podría despegarse de Biden. El centrista es el favorito en dos -quedando segundo en tres, incluidas las joyas-, mientras que Bloomberg sólo se impondría en Arkansas (31). Aunque, para que se mantenga el suspense, tiene opciones de llevarse un buen puñado de delegados en la conservadora Texas y arañar unos cuantos en California.