La inteligencia de EE UU da por muerto a Hamza bin Laden, hijo del fallecido exlíder de Al Qaeda, Osama bin Laden. Se considera que Hamza bin Laden era el nuevo máximo responsable de la organización terrorista después de la difusión de varios vídeos en los que expresa su deseo de venganza y llama a sus seguidores a atacar EE UU y sus aliados occidentales, en respuesta a la muerte de su padre en mayo de 2011. La Inteligencia americana no dio detalles sobre cuándo o dónde tuvo lugar su muerte ni se pronunció sobre si Washington jugó papel alguno en su muerte.