El presidente afgano, Ashraf Gani, anunció ayer un alto al fuego de una semana que carece de precedentes, ya que es el primero desde la invasión estadounidense de Afganistán hace 17 años. La tregua, ofrecida con motivo del Ramadán, se iniciará el próximo martes y llega después de que 2.000 clérigos islámicos aprobaran el lunes en Kabul una fatua contra los atentados suicidas y a favor de un proceso de paz. Al final de la reunión de los ulemas, Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés) perpetró un atentado suicida que acabó con la vida de 14 personas, de las cuales siete eran clérigos.