También suben, aparte de los propios unionistas del DUP, que ganan dos escaños, los católicos del Sinn Fein (7, +3), que no acudirán al Parlamento, y los nacionalistas galeses (4, +1). Desaparecen de los Comunes tres partidos, el más destacado el eurófobo y xenófobo UKIP, que pierde a su único diputado, tras bajar desde el 12,6% al 1,8%, hundimiento que ha provocado la dimisión de su líder, Paul Nuttall, quien achacó la catástrofe ha haber logrado ya su objetivo fundacional, la salida de la UE. Precisamente, el fundador del partido, Nigel Farage, acusó a May de haber puesto en peligro el "Brexit" con el adelanto electoral.

Tras anunciar a la Reina su intención de seguir gobernando, May confirmó en su puesto a la mayoría de sus ministros, a los que nombró por primera vez el pasado julio, cuando accedió al Gobierno tras imponerse en las primarias conservadoras celebradas tras la dimisión de Cameron a raíz del triunfo del "Brexit" en el referéndum del 23 de junio de 2016.

Los resultados de las elecciones han sido acogidos con satisfacción poco disimulada por las instancias rectoras de la Unión Europea, ya que a priori debilitan la posición negociadora del Reino Unido. La satisfacción se canalizó en una demanda generalizada a May para que no retrase el inicio de las negociaciones, algo a lo que la conservadora se comprometió ayer mismo.

"Nosotros podemos abrir las negociaciones mañana a las 09.30 de la mañana. Esperamos una visita de Londres, esperamos no sufrir retrasos adicionales en la conclusión de las negociaciones", declaró el presidente de la Comisión, Jean-Claude Juncker. De igual modo, el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, en una misiva de felicitación a May, le recordó que no hay tiempo que perder" para que arranquen unas negociaciones de las que Bruselas espera un resultado "lo menos desestabilizador posible" para "ciudadanos, negocios y países" de la UE. Bruselas recordó que, en todo caso, la fecha tope de cierre de las negociaciones es el 29 de marzo de 2019.