La Agencia de Estándares Alimentarios del Reino Unido (FSA) informó hoy de que 29 de los 2.501 test sobre productos de vacuno que ha realizado en los últimos días han dado positivo por contaminación con carne de caballo.

El organismo consideró positivos aquellos exámenes en los que el producto contenía más de un 1 por ciento de carne de caballo y subrayó que los 29 casos se refieren a los test desarrollados sobre siete productos que ya habían sido retirados de las estanterías de los supermercados.

La FSA confirmó que los productos que contenían carne equina fueron comercializados en el Reino Unido por Aldi (lasaña y espagueti boloñesa), Co-op (hamburguesas), Findus (lasaña), Rangeland (hamburguesas) y Tesco (hamburguesas y espagueti boloñesa).

El director de comunicaciones de la agencia, Stephen Humphreys, afirmó que se puede "asegurar" que los siete productos ya no están a la venta, si bien el director de la FSA en Gales, Steve Wearne, advirtió de que es "imposible" conocer la extensión real del fraude con carne de caballo.

"Los resultados de los test son una muestra de lo que se ha estado vendiendo en el mercado y lo que han estado sirviendo los proveedores, restauradores y comercios desde enero, cuando estalló esta historia, pero no tenemos información fiable sobre lo que habrá estado ocurriendo antes", dijo Wearne.

En ese mismo sentido se pronunció ayer el Parlamento británico a través de un informe de su comisión de Alimentación y Agricultura que alertaba de que los casos de contaminación en productos cárnicos que han salido a la luz hasta ahora podrían ser la "punta del iceberg" de una práctica habitual en la industria.

Once compañías de alimentación británicas, entre ellas Tesco y Asda, hicieron hoy pública una carta en la que aseguran que comparten la "ira y la indignación" de los consumidores ante la situación y acusan al Gobierno del Reino Unido de "mantenerse en silencio" ante el escándalo.

Downing Street (residencia del primer ministro británico), por su parte, afirmó a través de un portavoz que, "ante la pérdida de confianza de los consumidores, los comerciantes deben explicar qué han estado haciendo hasta ahora".

Los últimos productos etiquetados como vacuno y que contenían carne de caballo que han salido a la luz en el Reino Unido fueron hoy los pasteles de ternera que se habían distribuido en diversos comedores escolares del condado de Lancashire, al noroeste de Inglaterra.

Las autoridades de ese condado señalaron que el producto ha sido retirado de las cocinas de 47 colegios de la región, después de que ayer el condado de Staffordshire (centro de Inglaterra) decidiera quitar todos los productos de ternera de sus centros escolares por precaución.

También hoy la cadena de restaurantes, "pubs" y hoteles Whitbread hizo público que ha hallado restos de ADN equino en lasañas y hamburguesas que se servían en sus establecimientos.

En Irlanda del Norte, la compañía que suministra carne a los hospitales y centros de salud (BSO) divulgó que ha detectado carne de caballo en algunas de sus hamburguesas.

La FSA indicó, por su parte, que sus inspectores examinaron el jueves tres nuevas plantas de procesado de carne en Inglaterra, después de que el registro de otras dos el pasado martes llevara ayer a la detención de tres personas en Gales e Inglaterra.

Catherine Brown, directora ejecutiva de la agencia, explicó que los exámenes tienen como "prioridad" detectar carne de caballo, si bien también "se estudiará" si puede haber contaminación por otro tipo de carnes, como de cerdo.