La Policía detalló que los muertos en la localidad de Gaur, en la zona meridional nepalí de Terai, se han elevado a 27, entre ellos cinco mujeres, después de que en las últimas horas se confirmara la muerte de otras tres personas en los disturbios.

Los enfrentamientos tuvieron lugar este miércoles, cuando unos 700 maoístas y unos 1.500 miembros del grupo Madhesi Janaadhikar Forum (MJF, Foro para la defensa de los derechos de la etnia Madesh) se dirigieron a un mismo lugar de reunión para celebrar sendos encuentros políticos y se enzarzaron en una violenta refriega.

Tras los disturbios, las autoridades impusieron un toque de queda que continúa hoy en vigor hasta las 15.00 hora local (09.15 GMT) en la ciudad de Gaur, a unos 150 kilómetros al sur de la capital.

Nepal vive momentos de tensión por la protesta de los empresarios y comerciantes contra la ex guerrilla maoísta, a la que acusan de extorsionar e intimidar a la población pese a haber firmado un acuerdo de paz en noviembre pasado.

Buena parte de los empresarios nepalíes secundaron este martes y ayer, miércoles, una huelga general para denunciar la situación, pero anoche decidieron poner fin a la protesta después de que el Gobierno se comprometiera, por escrito, a garantizar su seguridad.

El detonante de la protesta empresarial fue la paliza recibida el domingo pasado por un hostelero de Katmandú por seguidores de los maoístas, después de que se negara a hacer un "donativo" de unos 100.000 euros a un sindicato de la ex guerrilla.

Los rebeldes firmaron en noviembre pasado un acuerdo con el Gobierno por el que se comprometieron a abandonar las armas después de una década de guerra civil que se cobró unas 13.000 vidas.

Nepal atraviesa un proceso de transición que prevé la incorporación de los ex guerrilleros al Gobierno y la convocatoria de elecciones, en principio previstas para junio, de las que saldrá una Asamblea Constituyente que decidirá si el país sigue siendo una monarquía o se convierte en una república.