La Unión Europea (UE) ha anunciado que aportará casi dos millones de euros a los programas nacionales para detectar cualquier brote de gripe aviar y ha pedido a los países de la UE que revisen sus análisis de riesgo y las medidas aplicadas hasta ahora en las zonas con mayor peligro de gripe aviar con el fin de aprobar nuevas restricciones, especialmente el encierro de las aves domésticas, informó el portavoz comunitario de Sanidad, Philip Tod.

La Comisión Europea decretará el sacrificio de todas las aves de corral que resulten infectadas en caso de que la gripe aviar se contagie de aves silvestres a pollos en la UE, en cumplimiento de la legislación comunitaria que prevé también el análisis de las granjas de la zona afectada en búsqueda de nuevos casos.

Los expertos veterinarios del Comité Permanente de la Cadena Alimenticia y Salud Animal acordarán mañana hacer general estas medidas si se da el caso de que la gripe aviar, que de momento sólo afecta a aves salvajes en la UE, se trasmite a las aves de corral.

También en este caso, los Estados Miembros deberán poner en marcha las disposiciones que ya aplican los países en los que se hallaron brotes en aves silvestres de acotar una "zona de protección" en un radio de tres kilómetros del foco y una "zona de vigilancia" a 10 kilómetros, donde se restringirá el movimiento de las aves y su venta.

Asimismo, el Comité Permanente decidirá hoy hacer automático el establecimiento de las zonas de protección y vigilancia cuando se den nuevos casos de gripe aviar en aves silvestres.

Por el momento, ya aplican esta medida Grecia, Italia, Eslovenia, Austria, Alemania y Hungría, donde se han detectado brotes de la enfermedad en cisnes salvajes.