La conservera ribeirense Ignacio González Montes (IGM) recupera la actividad de la planta de Thenaisie Provoté en O Grove. La empresa familiar con sede en Couso (en la parroquia de Aguiño) asumirá la gestión de la histórica compañía e incrementará de esta forma su capacidad productiva incorporando a su gama de productos la familia de especialidades, fundamentalmente de sardinas, mejillón y mariscos blancos. Con este movimiento, la factoría vuelve a la vida con el objetivo de recuperar el lustre perdido. Allí se llegaron a generar 130 puestos de trabajo y unas ventas por valor de 40 millones de euros.
La conservera Thenaisie se salva, sus trabajadores no
La factoría de Thenaisie Provoté en O Grove pertenece a Maquinaria Tomás Guillén desde el pasado octubre, cuando esta firma se hizo con las instalaciones tras el conflicto sociolaboral originado en torno a la histórica conservera. El auto judicial dictado entonces valoraba como la más positiva esta oferta, que supera los 5 millones de euros y que mantendría 19 empleos, catorce en la villa meca y cinco en Mos, donde Thenaisie tiene un centro logístico. De esta forma se descartaban las otras dos propuestas que había encima de la mesa: la de Canet Ferrero Inversiones y la de Conservas Rías Baixas.
IGM, presidida y dirigida por Juan González-Montes Portela (tercera generación), lleva unos años desarrollando un plan de crecimiento a base de grandes inversiones en nuevas infraestructuras. Ya en el año 2019 emplearon 3 millones de euros para una actualización de sus instalaciones en Couso a base de automatización de procesos, integración y nuevas líneas para productos. Solo un año más tarde la inversión anunciada fue de 5 millones más, esta vez para la construcción de nueva nave de fabricación anexa de 5.600 metros cuadrados y un nuevo frigorífico para una capacidad de 2.000 Tm.
En 2021 la Xunta declaró como iniciativa empresarial prioritaria la ampliación proyectada por IGM en su sede de Ribeira. La intención era la de movilizar 9,5 millones de euros y crear 35 puestos de trabajo directos en el marco de una integración de las actividades de acondicionamiento y logística en una única localización, mejorando la eficiencia, los costes y la competitividad de la compañía.
Ahora, como parte de este plan de crecimiento, IGM llegó a un acuerdo con Maquinaria Tomás Guillén para la puesta en marcha de la factoría grovense. De esta manera se logra recuperar la actividad de la histórica fábrica y con ello un número importante de empleos. Esta actividad había cesado hace unos meses tras el concurso y la posterior liquidación de Thenaisie Provoté.
El objetivo de la conservera a medio plazo es recuperar los volúmenes de actividad y niveles de empleo que llegaron a alcanzar los 40 millones de euros y 130 puestos de trabajo en épocas pasadas.
El principal producto de IGM son las conservas de atún, si bien también elabora enlatados de cefalópodos (calamar, chipirón y pulpo), pescados (caballa, sardina y jurel) y mariscos (almeja, navaja, zamburiña, berberecho y mejillón).