Samuel Kwesi Koufie, uno de los tres supervivientes al naufragio del pesquero gallego Villa de Pitanxo, que se hundió el pasado 15 de febrero a 450 kilómetros al este de Terranova (Canadá), destacó ayer la "gravedad" de lo sucedido tras las informaciones que se vienen publicando desde el fin de semana sobre las diferentes versiones de los rescatados sobre el suceso y de sus rescatadores. Las familias de los 21 fallecidos, por su parte, celebran la actitud del ghanés: "Agradeceremos de forma eterna que Samuel fuese valiente".

Tal y como publicó FARO el domingo, el testimonio de Samuel Kwesi ante la Guardia Civil y ante la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes Marítimos (Ciaim) difiere del ofrecido por Juan Padín (capitán del barco) y Eduardo Rial (sobrino de este último).

En un comunicado a la prensa ayer por la noche, Samuel no quiso entrar a "confirmar ni desmentir" dichas informaciones, pero indicó que "por el bien de que su testimonio llegue a buen término en sede judicial" no ha hablado con los familiares de las víctimas, "pese a ser él el primero" que quiere hacerlo.

"No quiero que gire sobre mi persona esta tragedia tan grande por respeto a mis compañeros y para que sean las autoridades las que definan las responsabilidades", subrayó el marinero de origen ghanés, que aseguró que no quiere "entrar a confirmar ni a desmentir" las publicaciones que ahondan en el tema desde ayer, lunes.

Por ello, pidió "comprensión" a las personas que están esperando a saber su versión.

Ante esto, los familiares de los 21 fallecidos agradecieron a Samuel "su valentía" y que no haya sucumbido "a la mentira". "Ahora queda un proceso judicial por delante", añadieron.

"Personas como él contribuyen a que este mundo sea más justo. Su valentía, a pesar de todas las presiones, es ejemplar", reivindicaron en un mensaje enviado a los medios de comunicación.