El remolcador Ría de vigo se encuentra ruta de la costa de Francia para participar en las labores de recogida de hidrocarburos que pudiese haber tras el hundimiento del "MV Grande America" el pasado 10 de marzo. El buque fue activado por la EMSA a petición de Estado Francés. Cuenta con nuevos equipos anticontaminación.
Para los trabajos de contención y recogida emplea unas barreras que rodean los vertidos y se espera que puedan recuperar el máximo de combustible que se haya vertido desde los tanques del barco accidentado.
El dispositivo desplegado ha movilizado a otros dos barcos españoles, que se unen al buque "Ría de Vigo", anunciaron este viernes las autoridades francesas. El" Ría de Vigo" fue fletado por la Agencia Europea de Seguridad Marítima (ESMA) y está previsto que llegue a la zona este sábado.
A petición de las autoridades marítimas francesas, y en el marco de la cooperación franco-española activada, el remolcador "Alonso de Chaves" se sumará al equipo a principios de la próxima semana, y el "María de Maeztu" permanecerá disponible en Santander en caso de que sea necesario.
El Ría de Vigo, con 68 metros de eslora y 14 de manga, se suma así a un amplio dispositivo que busca contener la mancha y evitar que se expanda por el Golfo de Vizcaya.
Además, el mal tiempo está jugando en contra de los trabajos, ya que el fuerte oleaje interfiere en las labores. De hecho, se espera que el Ría de Vigo llegue a la zona esta madrugada, sin embargo, las olas de cuatro metros y el viento duro condicionan su travesía.
El incendio del "MV Grande America"
El pasado 10 de marzo el "MV Grande America", uno de los buques habituales en la terminal de vehículos de Bouzas, sufría un incendio en aguas francesas cuando navegaba en ruta desde Hamburgo a Casablanca. A bordo se encontraban 26 tripulantes y un pasajero que fueron rescatados "sanos y salvos" por una fragata británica.
El "MV Grande America" cubre la exportación de coches de PSA hacia Sudamérica, con una conexión mensual con Vigo.
Después de anunciar al principio el capitán que había controlado el fuego y que su intención era dirigirse hacia A Coruña, finalmente informó que la situación a bordo había empeorado y que varios contenedores estaban en llamas. Poco después de las dos de la madrugada, decidió abandonar el barco a bordo de un bote salvavidas.
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