La jueza ordena la obtención forzosa del ADN del presunto homicida de Salceda

Florian Rama se negó a dar la muestra biológica, pero la diligencia es “imprescindible”

En un reguero de sangre por donde huyó el agresor se halló un perfil genético de varón

Imágenes policiales del albanés Florián Rama realizadas tras su detención en Vigo en junio de 2018, un año antes del crimen.

Imágenes policiales del albanés Florián Rama realizadas tras su detención en Vigo en junio de 2018, un año antes del crimen. / FDV

Marta Fontán

Marta Fontán

Cuando el pasado 6 de enero Florian Rama fue detenido en el Reino Unido como presunto autor del crimen del joven Soufian Mraha en junio de 2019 en Salceda de Caselas, en el atestado de la Guardia Civil ya se glosaban los indicios que señalaban a este albanés de 31 años de edad como presunto autor del homicidio. Tres testigos lo habían identificado en las fotografías de reseñas policiales de una docena de individuos con antecedentes delictivos que les mostraron los investigadores. Con domicilio en Vigo en aquella época, concretamente en la calle Lorient próxima a Balaídos, su teléfono móvil lo situó, sin embargo, esa madrugada en el lugar de los hechos. Y las cámaras que captaron a un hombre huyendo de la zona del asesinato mostraban una calle donde, casualmente, vivía un amigo del sospechoso. Con esta batería de evidencias y una vez llegó a España tras su extradición, la jueza del caso, la titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Porriño, decretó su ingreso en prisión provisional, donde continúa a día de hoy a la espera del juicio.

Pese a los indicios que se acumulan en su contra, en esta causa judicial falta todavía completar una prueba que es clave en toda investigación de estas características: la del ADN. Cuando Florian pasó a disposición judicial, junto a acogerse a su derecho a no declarar se negó a facilitar una muestra biológica de cara a obtener su perfil genético. Una negativa que ha llevado al juzgado a dictar un auto en el que, previa petición de la Guardia Civil, autoriza a que se le recojan muestras biológicas, mediante frotis bucal, diligencia que “deberá realizarse mediante el recurso a las medidas coactivas mínimas indispensables, que deberán ser proporcionadas a las circunstancias del caso y respetuosas con su dignidad”. Junto a la autorización judicial, la jueza ordena librar mandamiento al grupo de la Policía Judicial que llevó el peso de la investigación para la práctica de esta diligencia.

El auto, con fecha del pasado 7 de marzo y que no ha sido recurrido, ya es firme. En el mismo se señala que dados los “indicios fundados” existentes contra este albanés y la gravedad de unos hechos constitutivos de un delito de homicidio o incluso de asesinato, la medida que se ordena resulta “proporcionada”, “necesaria” e “imprescindible”. Tras citar los artículos de la Ley de Enjuiciamiento Criminal (LEC) que amparan la “ejecución forzosa” de este diligencia cuando un detenido se opone a la recogida de muestras mediante frotis bucal, la jueza resume que se trata de una “medida totalmente idónea” para el fin perseguido, que no es otro que el de esclarecer la autoría del crimen mediante la comparación del ADN del investigado, “como principal sospechoso de los hechos”, con las muestras genéticas encontradas en la ropa de la víctima.

Criminalística

La chaqueta, camisa blanca, pantalón negro y zapatos que vestía Soufian la noche del crimen fueron analizados por los especialistas del Departamento de Biología del Servicio de Criminalística de la Guardia Civil, al igual que otros vestigios recogidos en el lugar de los hechos y en los que, junto al perfil genético del fallecido, se hallaron los de otros dos individuos anónimos. El denominado como “varón 1” resulta clave de cara a los análisis comparativos que se harán con el ADN de Florian. Y es que, según se señala en el atestado policial, en la inspección ocular que se hizo tras el crimen se halló un reguero de sangre que discurría por las calles Victoriano Pérez Vidal y Rafael Tilde Adrio de Salceda, las mismas por las que dos testigos vieron marcharse al individuo que momentos antes había atacado a Soufian. Tras recogerse una muestra de dicha sangre con un hisopo, el análisis de la misma desveló a ese “varón 1”. Si dicho perfil coincide con el ADN del albanés, la investigación judicial dispondría de una prueba de cargo de gran valor que se uniría a los indicios que ya hay en la causa.

Tras el crimen, Florian abandonó España y se asentó en Reino Unido, donde supuestamente se dedicaba al tráfico de drogas, concretamente al cultivo de marihuana. Allí fue finalmente capturado a principios de este 2024, transcurridos más de cuatro años desde el homicidio del joven Soufian.

La Audiencia confirma el auto de prisión provisional

Tras ser localizado y detenido a principios de año en Reino Unido, Florian Rama fue extraditado y llegó a España a finales de enero. El día 25, concretamente, pasó a disposición del juzgado de Instrucción de Porriño que lleva el caso, cuya titular decretó su ingreso en prisión provisional investigado, en principio, por un delito de homicidio. La instrucción en marcha determinará si esta será la calificación final o se agrava a la de asesinato. Este albanés compareció en el juzgado el mismo día en que aterrizó en el aeropuerto de Vigo y rodeado de fuertes medidas de seguridad mientras era abucheado por un grupo de familiares y amigos de la víctima, quienes se mostraban convencidos de que Florian solo era el “autor material” del crimen pero que detrás de lo ocurrido había un “autor intelectual”, algo que descarta la Guardia Civil. Tras ingresar en el penal, la defensa del investigado presentó un recurso de apelación contra el auto que decretó su entrada en la cárcel, pero recientemente la Audiencia Provincial de Pontevedra confirmó la medida privativa de libertad. Junto a esta causa judicial, un juzgado de Cambados tenía activa una requisitoria para notificarle el auto de apertura de juicio en su contra por su implicación en un entramado dedicado al acopio y comercialización de cannabis, hachís y heroína en la provincia de Pontevedra, que fue desarticulado en 2018.

Una de las récnicas comparativas del análisis efectuado de la foto del individuo del pub de Salceda con la de Florian Rama

Una de las récnicas comparativas del análisis efectuado de la foto del individuo del pub de Salceda con la de Florian Rama / FDV

La nariz, el mentón o el labio superior, rasgos que destacaron en la prueba de identificación facial

El análisis comparó una foto policial del albanés con la tomada en un pub la noche del crimen: las analogías “apoyan” que son la misma persona

Junto a la prueba testifical, la de geolocalización del teléfono móvil y la de las cámaras de una farmacia ubicada cerca del lugar del crimen, la Guardia Civil entregó al juzgado otra que no es tan habitual: un informe técnico realizado por el Departamento de Identificación del Servicio de Criminalística de la Guardia Civil. Otro indicio más en contra de Florian Rama ya que, como hacen constar los expertos, “el rostro es el principal rasgo distintivo en el ser humano” y ciertas características, como las dimensiones de los huesos o los rasgos morfológicos faciales, “son diferentes en cada individuo”. Lo que se debía determinar es si el individuo de la “imagen dubitada” era Florian, aportándoles para ello tres fotos del albanés de una reseña policial de 2018, cuando fue detenido por tráfico de drogas. Esa imagen dubitada es la que se tomó en un pub de Salceda la noche del crimen y después se publicó en Facebook, donde se veía al individuo extranjero que tuvo un primer altercado con Soufian en ese local y que después lo atacó fuera tras decirle: “¿Fuiste tu el que me tiró la copa? Si eres tan valiente ven y lo solucionamos”. Los expertos hicieron un cotejo de la foto del varón del pub con la foto del albanés, determinando que todos los caracteres morfológicos y cromáticos eran “coincidentes”. Había además una serie de rasgos y particularidades “con alto valor identificativo”: la nariz con base elevada que se ve en ambas imágenes, el labio superior prominente, el mentón con “inclinación entrante” y una inserción en la zona parietal izquierda (frente) con forma rectangular y “con escasa abundancia capilar”. Las analogías encontradas apoyan “moderadamente” que son la misma persona, se concluyó en el informe criminalístico.

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