Farmacias se abastecen para no quedarse sin 'stock' el próximo invierno

Boticas viguesas realizan pedidos en grandes cantidades de antibióticos, como la amoxicilina, ante el temor de que vuelva a haber faltas en la época de mayor pico de virus respiratorios

Una trabajadora de una farmacia de la calle Aragón, con cajas de medicamentos.

Una trabajadora de una farmacia de la calle Aragón, con cajas de medicamentos. / José Lores

Las farmacias están viviendo en los últimos meses momentos extraños, como los tiempos que corren. Los laboratorios que se encargan de fabricar los medicamentos, en muchos casos, no están siendo capaces de atender la demanda existente, provocando problemas de stock. La cadena de suministro por tanto acaba llegando al paciente, que ve en algunos casos cómo el medicamento habitual que consume no está disponible. El máximo exponente se vivió a finales del año pasado, cuando la explosión de infecciones respiratorias agotó en las boticas los antibióticos para niños, concretamente la amoxicilina, causando un importante trastorno para médicos, farmacéuticos y madres y padres. Hasta seis marcas de amoxicilina llegaron a registrar problemas de suministro, y la alternativa era aceptar un genérico de otro laboratorio o acudir al médico de familia a que le ajustasen el tratamiento.

Una situación similar, incluso más grave, se vivió previamente con el Dumirox de cien miligramos, el principal medicamento recetado para tratar la depresión en adultos y que estuvo durante meses sin estar disponible en las farmacias porque el laboratorio no lo distribuía. En este caso solo hay un genérico, la Fluvoxamina, y al ser un tratamiento tan sensible, muchos pacientes no querían aceptar un cambio pese a que se trata del mismo principio activo. Diversas presentaciones de Ibuprofeno o fármacos para la diabetes y la disfunción eréctil son otros de los que habitualmente han tenido problemas de faltas en el mercado estos últimos tiempos.

Es por ello que las farmacias viguesas están tomando medidas para que no se repitan situaciones parecidas. Ahora que la situación está algo más estabilizada (los medicamentos que faltan tienen sustitutivos suficientes y por tanto no presentan problemas para los pacientes), las boticas están empezando a planificar ya el próximo invierno, cuando se produzcan los picos de infecciones respiratorias y por tanto haya más demanda de determinados medicamentos, para que no se repita una situación similar.

“No sabemos lo que va a faltar, así que en los pedidos que estamos haciendo cogemos más existencias de las que ahora mismo necesitamos ya pensando en el próximo invierno, concretamente antibióticos”, explica José Manuel Reboreda, titular de la farmacia ubicada en el número 19 de la calle Aragón. Es decir, los farmacéuticos no quieren que vuelva a pasar lo que sucedió con la amoxicilina para niños en noviembre y diciembre del año pasado. “Lo hacemos pensando en nuestros pacientes, en las personas a las que servimos todos los días”, apunta este boticario.

Las soluciones que ofrecen los farmacéuticos a los pacientes que acuden con su receta a por un medicamento que no está disponible es o bien ofrecerle algún genérico o pedirles que vayan al médico de cabecera a que les cambien el tratamiento para recetarle otro tipo de fármacos. Pero hay una tercera vía. Y es que hay boticas que están adscritas la herramienta de LUDA Partners, una red digital en la cual el farmacéutico puede incluir el código del medicamento que está buscando el cliente y que está desabastecido, no está disponible en el mercado y comprobar si alguna farmacia cercana tiene alguna caja en stock porque no la ha vendido y a la que se puede derivar directamente a la persona interesada. Es decir, ayudan a localizar un medicamento. El buscador de LUDA Partners se utiliza como cualquier buscador de Internet y evita que una persona tenga que ir peregrinando de farmacia en farmacia para encontrar un medicamento concreto.

A finales del año pasado, eran cincuenta las boticas gallegas adheridas a esta red de distribución interna entre farmacias. Uno de los medicamentos más buscados por las farmacias en esta herramienta es Pritor, indicado para el tratamiento de la hipertensión arterial en adultos y que se utiliza también para prevenir los problemas cardiovasculares, como ataques cardíacos y apoplejías. Aunque este no tiene problemas de suministro, sí que es habitual que alguna botica se quede sin este fármaco en algún momento concreto del día, porque es uno de los medicamentos más recetados (solo se dispensa mediante prescripción médica), por lo que se suele derivar a los pacientes a boticas cercanas utilizando la herramienta LUDA Partners para localizar cuál de ellas tiene alguna caja disponible. Trankimazin (tratamiento para la ansiedad) o Kreon (para la insuficiencia pancreática) son otros de los fármacos más demandados en las boticas de la ciudad.

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