Ibermutua calcula que iniciará las obras de reforma del Cíes entre abril y junio

La reforma del antiguo policlínico Cíes como centro asistencial de Ibermutua ya ha sido adjudicada. Es la constructora San José la que se ha hecho con este contrato, por un importe de 4,34 millones de euros –5,25 millones con IVA–. En la actualidad, la mutua está ultimando el resto de trámites para poder iniciar los trabajos y las previsiones con las que trabajan es que arranquen entre abril y julio.

En la actualidad, Ibermutua trabaja en otras licitaciones necesarias para el arranque de esta actuación, como puede ser la coordinación de seguridad y salud, cuyo plazo de presentación de ofertas finaliza hoy.

Por la obra de reforma del emblemático edificio del arquitecto Xosé Bar Boo pugnaron tres empresas, aunque una fue excluida por no reunir las condiciones requeridas. De las otras dos, la constructora San José ha sido la elegida “por ser la empresa –no incursa en valor desproporcionado– que mejor relación calidad precio ha obtenido”.

El contrato para este lifting que se emprenderá en el número 15 de la avenida de Madrid se ha adjudicado por 230.000 euros menos que la cantidad por la que salió a contratación.

La duración prevista para los trabajos de reforma es de un año. Sin embargo, los pliegos permiten aumentar este plazo hasta los 14 meses debido a “la complejidad del edificio” por su singularidad y por estar protegido por Patrimonio Cultural de la Xunta de Galicia. Así, en el peor de los horizontes que plantea ahora Ibermutua, si la actuación comenzara en junio, debería estar finalizada en agosto del próximo año. Nueve años después de que cerrara sus puertas.

Cerrado desde 2015

Fue en verano de 2015, con la apertura del Hospital Álvaro Cunqueiro y la reordenación de toda la atención especializada en el Área Sanitaria de Vigo, cuando el Servizo Galego de Saúde (Sergas) recogió sus enseres y echó el candado. La Consellería de Sanidade devolvió las llaves de este inmueble construido en 1967 a la Tesorería General de la Seguridad Social, que se lo había cedido. Este lo sacó a subasta por 3,5 millones de euros, pero no se presentó ninguna oferta por él. Fue entonces cuando Comisiones Obreras propuso a las administraciones que lo reconvirtieran en una residencia geriátrica, con un modelo pionero, que ayudar a la paliar el déficit de plazas para mayores en la ciudad y ofreciera, además, otro modelo de alojamiento para personas con mayor autonomía. Pero nadie recogió el guante.

Ibermutua lo adquirió en 2019 por el mismo precio de la puja y, en un inicio, sus planes eran estrenarlo ya el año. Sin embargo, la pandemia frustró sus planes y los plazos administrativos se dilataron.

El objetivo de esta actuación para esta mutua colaboradora con la Seguridad Social es concentrar toda la oferta asistencial y de servicios que presta en la ciudad en un solo edificio. En la actualidad los tiene dividido en dos puntos: uno en Rosalía de Castro y otro en García Barbón. Según la información que la mutua facilitó en un inicio, en los 4.448,99 metros cuadrados del inmueble contará con espacios destinados a urgencias, quirófanos, consultas, radiología convencional, despachos y salas de especialidades como otorrinolaringología, alergología o neurofisiología

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