Portugal retrasa ahora a finales de 2025 la llegada del nuevo Tren Celta

Las mejoras en la conexión ferroviaria entre Vigo y Oporto seguirán a la espera. Mientras los estudios y proyectos de la nueva línea de Alta Velocidad continúan avanzando con paso lento pero seguro, la explotación actual no tendrá mejoras significativas hasta finales de 2025.

Comboios de Portugal, la operadora pública del país vecino que ofrece el servicio del Tren Celta en colaboración con Renfe, no recibirá hasta dentro de dos años y medio los nuevos trenes regionales que modernizarían a los vetustos de la serie 592 que alquila actualmente a Renfe. Estas unidades cuentan con 40 años de experiencia y no regresarán al parque móvil de la compañía pública, al menos, hasta 2026.

Según informa el diario portugués ECO, la entrega de la primera unidad está prevista por contrato en octubre de 2025. A partir de esta fecha y tal y como confirman fuentes oficiales de la empresa se recibirán dos unidades por mes, siendo las unidades híbridas para diésel y eléctricos –con capacidad para circular en las vías de ambos países– las primeras en ponerse en servicio.

El contrato de 22 trenes regionales suscrito con la suiza Stadler es uno de los pilares de la modernización ferroviaria que ha emprendido el gobierno de Antonio Costa, siendo suscrito en octubre de 2020 por 158 millones.

Esto obligará a que la compañía lusa tenga que seguir alquilando los trenes diésel conocidos como “camellos” por su característica joroba y que conectan las dos ciudades de la Eurorregión en dos horas y veinte minutos con dos frecuencias diarias por sentido.

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