Las orcas comenzaron a rodear la embarcación. A tomar contacto y a golpear el timón. Una y otra vez. Un terror a un misterio aún por resolver. Un velero navegaba de Vigo a Sada y todo ocurrió en aguas de Fisterra, cuando estos imponentes animales atacaron el barco y le rompieron el timón. Al final tuvo que ser remolcado hasta Muros.