A Vox no le gusta ver la bandera LGTBI ondeando en las fachadas de las sedes gubernamentales. El Concello de Vigo se ha sumado un año más al gesto simbólico de colgar la enseña arco iris en Praza do Rei con motivo del Día del Orgullo Gay, pero el partido ultraderechista se ha movido para exigir su retirada, y ha optado por la vía de la denuncia policial contra el alcalde de la ciudad, Abel Caballero.

El presidente de Vox en la provincia de Pontevedra, Álvaro Díaz-Mella, ha presentado esta mañana un escrito en la Comisaría de la Policía Nacional de Vigo para denunciar a Caballero. Le acusa de vulnerar la ley de 1981 que regula el uso de la bandera de España y afirma también que “podría estar incurriendo en una infracción tipificada en el artículo 543 del Código penal”.

"El Ayuntamiento de Vigo está faltando el respeto a las instituciones y a las banderas oficiales de forma reiterada”, defiende la formación de Santiago Abascal, que exige se retire "de forma inmediata la bandera LGTBI". Aseguran también estar estudiando acciones judiciales, tanto en vía contenciosa como en vía penal, ya que, a su juicio, "no es la primera vez que el alcalde no respeta la legalidad".

El partido se ultraderecha se basa en una sentencia del Tribunal Supremo de 2020, en la que se ampara el alcalde de Madrid, el popular José Luis Martínez-Almeida, para no colgar de la sede del Ayuntamiento madrileño la bandera reivindicativa del colectivo LGTBI. La resolución judicial fue dictada sobre una decisión de San Cruz de Tenerife para colocar en 2016 una bandera tricolor por el Movimiento de Autodeterminación e Independencia del Archipiélago Canario.

Desde entonces, aunque Madrid ha utilizado esa sentencia para justificar que la bandera arcoíris no ondee en su sede, otras muchas instituciones han mantenido esta costumbre.