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Decir adiós al tabaco con ayuda de la AECC

La entidad desarrolla anualmente en su sede viguesa un programa de deshabituación tabáquica cuyo porcentaje de éxito alcanza un 60% y para el que hay lista de espera

Usuarias realizando una prueba que permite saber a las coordinadoras del programa en Vigo si han fumado o no. / PABLO HERNÁNDEZ

Ha llegado a consumir hasta dos cajetillas diarias y recuerda que se convirtió en fumadora habitual a los 17 años de edad. Por eso, con 60 recién cumplidos, dice que lleva prácticamente toda su vida con el cigarro en la mano y en la boca. Al otro lado del teléfono, Gloria Prieto tira de ironía haciendo referencia a la voz “tan dulce” que tiene y señala que recuperarla es uno de los motivos que la llevó a inscribirse en el programa de deshabituación tabáquica que la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) está llevando a cabo en la actualidad en su sede de Vigo.

Otra de las razones por las que Gloria dijo: “Hasta aquí”, fue el hecho de que no pocas veces ha intentado dejarlo por su cuenta, sin embargo, siempre acabó volviendo a caer “en el vicio”. “Puedo decir que ayer ya no he fumado nada y hoy es el segundo día”, indica. A la pregunta de cómo se encuentra, Gloria responde que “algo nerviosa, pero para mí haber logrado esto ya es un paso importantísimo”.

“Tengo un edema en las cuerdas vocales y por eso decidí que el tabaco no iba a ganarme la partida”

Gloria Prieto - Usuaria del programa

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Desde el pasado 1 de febrero, Prieto asiste cada martes a la sede de la AECC en Ronda de Don Bosco para participar en las sesiones grupales que coordina la psicóloga de la entidad en Vigo, Loreto Puente. Junto a otros 14 usuarios, Gloria va siguiendo los consejos pautados por la profesional y comenta que “hemos ido bajando poco a poco el número de cigarros y teníamos una fecha marcada en el calendario en la que teníamos que dejar de fumar. Es duro, porque por momentos me mareo y siento que tengo mono, pero es que tengo un edema en las cuerdas vocales y por eso decidí que el tabaco no iba a ganarme la partida. Es verdad que psicológicamente tienes que estar fuerte y mentalizada, pero a medida que iba reduciendo el número de pitillos, me daba cuenta de que realmente no tengo tanta necesidad del tabaco, es más el hecho de que, en mi caso, lo relaciono con la actividad social y a estar con las amigas tomando un café”.

Gloria Prieto confiesa que no sabía qué se iba a encontrar en la primera sesión del programa, sin embargo, con el paso de las semanas, la valoración que hace del mismo es “muy positiva”. A este respecto, esta viguesa destaca que “hay muchas recomendaciones que, aunque ya las conoces, la psicóloga nos ayuda a aplicarlas de una forma más eficaz. Para mí también es muy importante el grupo que se ha creado, porque podemos compartir sensaciones, antes de entrar hablamos también de cómo nos ha ido la semana y si vemos que una persona flaquea, tiramos de ella. Siempre tenemos a alguien apoyándonos y sirve para saber que no estás sola en este proceso”.

Para esta usuaria del programa de deshabituación tabáquica de la AECC ya es todo un logro haber conseguido sumar dos jornadas sin probar el tabaco y afirma que “no es un proceso fácil, porque tienes que saber que cuando lo dejas no puedes hacer ninguna excepción. Yo he estado sin fumar ocho meses, un año, pero es que no puedes ni fumar medio cigarro en una boda, porque yo siempre caí así”, indica Gloria, quien concluye que esta vez sí, que va a por todas y que “por fin” lo va a conseguir.

Cambio en el perfil

La AECC lleva años desarrollando este programa en Vigo, su porcentaje de éxito se sitúa en un 60% y la responsable de impartir las sesiones, Loreto Puente, hace referencia a que en los últimos años ha habido un cambio en el perfil de la persona participante. En este sentido, la psicóloga de la entidad subraya que “lo que estamos comprobando es que los fumadores son cada vez más jóvenes, pero el abandono también se produce antes. Por ejemplo, en el grupo actual, la horquilla de edad va desde los 30 hasta los 60 años. El factor de la edad es determinante a la hora de decantarse por dejar el tabaco, porque empiezan a aparecer problemas de salud y por prescripción médica toman esta decisión”.

“Los fumadores son cada vez más jóvenes, pero el abandono también se produce antes”

Loreto Puente - Psicóloga de la AECC

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Por otra parte, Puente señala que la pandemia del COVID también ha jugado un papel determinante en cuanto a la deshabituación tabáquica, y es que, según comenta, “muchas personas empezaron a fumar más con el confinamiento y llegaron a su límite. Además, las restricciones para fumar debido al COVID han servido también para que muchas personas se hayan planteado dejarlo definitivamente”.

No cualquier persona puede participar en este programa dirigido por la AECC, ya que previamente se realizan una serie de entrevistas para conocer el grado de motivación e implicación, así como un análisis pormenorizado de los factores psicológicos y sociales que pueden influir en el proceso. “A partir de ahí, si son aptos se incorporan al programa”, indica la psicóloga.

En la actualidad, hay lista de espera para participar en este plan de deshabituación tabáquica y Loreto Puente explica que suelen llevarse a cabo tres programas al año en las sedes de Vigo, Tui y Pontevedra: “Tras unas primeras sesiones de toma de contacto, las últimas semanas son de abstinencia y realizamos un acompañamiento para prevenir recaídas. El grupo es un factor clave, porque se apoyan unos a otros, comparten aquellas técnicas que les funcionan mejor... La propia dinámica del grupo les sirve como soporte. Tenemos por ejemplo a un matrimonio y a unos amigos que han decidido venir juntos al programa y se apoyan”.

Principales consejos: entender que es una adicción y lograr vencer el impulso

A la hora de desarrollar el programa de deshabituación tabáquica, la coordinadora del mismo en Vigo, Loreto Puente, indica que entre las principales recomendaciones que ofrece a los participantes se encuentran, en primer lugar, el hecho de que la persona que quiere dejar de fumar entienda que es una adicción. Esta psicóloga de la AECC señala que “es fundamental que entiendan que para ellos fumar es una acción automatizada, realmente no son conscientes ni de todo el tabaco que fuman ni de las atribuciones que dan al mismo. Para lograr dejarlo, deben entender su conducta como fumadores; analizar en qué situaciones fuman y por qué lo hacen es básico para iniciar la deshabituación”.

Puente afirma que “la nicotina es una sustancia que llega muy rápido al cerebro y también se elimina muy rápido, de ahí esa necesidad que tienen estas personas de fumar a cada instante. En este sentido, es importante que sepan que cuando dejen el tabaco sentirán un malestar durante un par de semanas, pero después desaparece”.

La coordinadora del programa apunta que “para vencer ese impulso que suelen tener de volver a fumar, lo que hacemos es disponer de una serie de herramientas y estrategias que les permitirán manejar la situación y a controlar ese momento, que no dura más de tres minutos y que puede contrarrestarse con métodos de relajación”.

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