Al igual que está sucediendo en el resto de Galicia y de España, la bajada de la curva de la quinta ola en Vigo no solo lleva semanas estancada, sino que registra repuntes puntuales. Como el de ayer. Los once nuevos positivos en COVID comunicados por la Consellería de Sanidade suponen el mayor pico de casos desde hace 24 días. La buena noticia del día la ponen las unidades de cuidados intensivos de la red de hospitales vigueses, que vuelven a quedar libres de virus con el alta del único paciente contagiado que permanecían en la del Álvaro Cunqueiro.

Las unidades de críticos se vaciaron de COVID el pasado 5 de octubre. Sin embargo, cuatro días después, volvió a ingresar uno en la del complejo de Beade. El viernes le dieron el alta. Aunque ya sin presencia del virus y, por tanto, sin necesidad de mantener en su atención las medidas de protección que esto conlleva, aún queda un paciente que ingresó en UCI por el SARS-CoV-2, pero ya ha negativizado.

En planta, en cambio, vuelven a subir en uno los contagiados en planta. En total, son cinco: tres en el Álvaro Cunqueiro y dos en el Ribera Povisa.

A pesar del repunte de nuevos casos, son más las altas concedidas en la última jornada, por lo que baja el número de casos activos en dos. En el área hay 69 personas que están atravesando la infección y están diagnosticadas.

La incidencia sube un punto con respecto a la jornada anterior.. Tanto a 7 días como a 14. Sube a 6 casos por cien mil habitantes y a 13 respectivamente.

La consolidada, la incidencia a dos semanas, lleva once días oscilando entre los 14 y los 12 puntos, lo que demuestra el estancamiento en el que se encuentra la situación epidemiológica. Aunque estos niveles son buenos y corresponden con los fijados por el Ministerio de Sanidad para la nueva normalidad, el área consiguió estar unos dos meses y medio por debajo de estos valores en el verano de 2020 –desde finales de mayo a principios de agosto–.