El Vigo Vertical sumará un nuevo miembro en el entorno de Urzáiz. Al elevador de la calle San Salvador y al futuro ascensor panorámico que conectará García Barbón con el complejo Vialia y Vía Norte, el HALO, se le añaden unas rampas mecánicas que salvarán los 15 metros de cuesta de la calle Escultor Gregorio Fernández. El Concello acaba de aprobar la contratación para la redacción del proyecto, para el que destinará en torno a los dos millones de euros. Su financiación parte del programa de Fondos Europeos del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana.
200 metros de acera
La actuación abarcará un total de 200 metros de acera para ubicar cinco cintas mecánicas, similares a las de Gran Vía, que estarán ubicadas en el margen derecho, en los números pares de la calle. El proyecto supone cerrar el corredor mecánico desde el mar –Areal – hasta la zona de San Roque. “Se trata de una pieza clave e importantísima que salva 15 metros de altura”, esgrimen fuentes municipales. En total, entre el HALO (40 metros), esta nueva actuación en Escultor Gregorio Fernández (15 metros) y San Salvador (7 metros) el corredor mecánico salvará hasta 62 metros de altura.
Otras actuaciones
Esta nueva actuación se suma a la decena de proyectos municipales que han puesto en jaque la orografía tan cuestionada como autóctona de la urbe viguesa.
El ascensor que conecta Pi y Margall con Camelias inauguró el Vigo Vertical en octubre de 2015. El rodeo de varios minutos en cuesta de 20 metros que era preciso dar para llegar de una calle a otra se transformó en 45 segundos.
Desde marzo de 2018, los vigueses pueden afrontar sin temor a quedarse sin oxígeno el enorme desnivel que hay desde Porta do Sol hasta Abeleira Menéndez gracias a las escaleras mecánicas.
Un segundo ascensor permite llegar de Torrecedeira a Pi y Margall en apenas unos segundos a través del parque de Camilo José Cela forma parte de un proyecto más amplio: conectar Beiramar con O Castro. Y ya hay tres tramos en funcionamiento. A este hay que sumar el ascensor que permite llegar desde Marqués de Valterra a Torrecedeira y el que luego permite alcanzar Camelias desde Pi y Margall.
Las rampas de Gran Vía son probablemente uno de los proyectos más ambiciosos del Vigo Vertical. La primera fase ya está activa desde hace casi un año y permite salvar el enorme tramo entre las calles María Berdiales y Venezuela. En Churruca, las escaleras mecánicas de la Plaza de Portugal permiten subir a la zona ajardinada desde la calle Uruguay. A mayores, entre Pizarro y calle Ribadavia, las escaleras mecánicas también salvan una cuesta de varios metros.
Futuros proyectos
Junto a los ya en marcha, se proyectan otros tantos en varios puntos de la ciudad: en Plaza de la Estación, en el centro de salud de Teis, en Joaquín Loriga, en calle Talude y entorno de Isaac Peral.
