El BNG local formuló un total de 44 enmiendas parciales a las ordenanzas fiscales para el próximo ejercicio 2022, en las que apuestan por unos impuestos y tasas municipales “socialmente más justos”, a través del “alargamento de bonificaciones” y exenciones en favor de las rentas “más bajas”, y por “ayudar con rebajas fiscales” las actividades económicas que están sufriendo el impacto de la crisis.